EXPEDIENTE ABIERTO: ¿ACCIDENTE O ASESINATO?
Han pasado cuarenta años de la muerte de Félix Rodríguez de la Fuente y sus compañeros Teodoro Roa y Alberto Mariano Huéscar después de que su avioneta se precipitara en las nieves que rodean Shaktoolik, una pequeña localidad de esquimales situada en el Área censal de Nome en Alaska, durante el rodaje de un capítulo para la serie El hombre y la tierra, y esta sigue planteando numerosas interrogantes entre la opinión pública.
En la tramitación de las diligencias previas, el Juzgado Central de Instrucción número 5, a cargo del juez José de la Mata, insta a la Fiscalía a la apertura de un expediente investigativo al “presumir la posible existencia de una infracción penal”, y denunciando la instauración de cuarenta años de “ley del silencio” (sic.) por parte de TVE con respecto a las verdaderas causas que rodearon la trágica muerte de Félix. Entre estas posibles causas, la denuncia baraja dos posibilidades: que el siniestro fuera en realidad un asesinato o que el propio Félix decidiera premeditadamente dar fin a su vida suicidándose. ¿Hubo acaso una conspiración, tejida en la sombra, que decidió acabar con la vida del hombre más influyente de la sociedad española de entonces?
¿EN EL PUNTO DE MIRA?
Durante los años setenta del siglo XX, el doctor Félix Rodríguez de la Fuente (1928-1980) se convirtió en la figura de mayor el presidente de gobierno o el deportista más mediático gozaban del clamor y la popularidad que el célebre naturalista se había granjeado desde que en 1964 apareciera por vez primera hablando de cetrería, con un halcón en el brazo, en el programa de televisión , en una intervención que apenas duraría tres minutos. El elevado número de cartas recibidas en TVE reclamando nuevamente su presencia fue el detonante para que Félix comenzara su andadura en la pequeña pantalla.
