Hay un debate en torno de la muerte de Pablo Neruda que no concluirá sino hasta que se dé a conocer el informe pericial definitivo, el martes 7 de marzo. Entonces sabremos, de manera fehaciente, si Neruda murió envenenado, como muchos sostienen desde hace más de once años, cuando Proceso (1801, 8 de mayo de 2011) recogió en una entrevista las declaraciones de Manuel Araya Osorio, chofer de Neruda y de su esposa, Matilde Urrutia, designado para esa tarea por el Partido Comunista de Chile.
Araya le contó a Francisco Marín, corresponsal de en la capital chilena, que Neruda, internado en la Clínica Santa María desde el miércoles 19 de septiembre, llamó por teléfono a Matilde el domingo 23 para urgirla a que acudiera a verlo, pues un médico no identificado le había inyectado algo en