Un Cupra a primera vista
CUANDO LE DICES A ALGUIEN la palabra “Cupra”, aunque no sea un fanático de los coches, todo el mundo sabe relacionarlo perfectamente con la deportividad. Cupra ha sido una seña de identidad durante décadas para todas las personas que querían ir un paso más allá con su automóvil. Tener un coche con acabado “Cupra” representaba el espíritu deportivo, la competición. Y es precisamente esto lo que ha llevado a Cupra a convertirse en lo que es a día de hoy. Esta seña ha tenido en su historia tanta fuerza por sí misma, que alguien en la casa Seat pensó que podría ser algo más independiente, que podría llegar a ser más que un acabado o un motor gordo. Alguien pensó que Cupra podría llegar a ser una marca que abarcara ese espíritu, y en 2018 se hizo realidad. Dejó de ser un apellido para convertirse en un nombre propio.
CUPRA HASTA AHORA
El primer miembro de la familia Cupra fue el Ate-ca lanzado en el año 2018, el
