ASESINOS NATOS
Los asesinatos cometidos por el dúo Starkweather- Fugate han quedado grabados en el inconsciente colectivo estadounidense por motivos de sobra. El inicial, y fundamental, es que esta ola de crímenes fue la primera en ser retransmitida por la televisión. El segundo tiene que ver con la naturaleza de los crímenes y su contexto: el apacible medio oeste de los Estados Unidos. Además, la vorágine de brutalidad protagonizada por la pareja coincidió con el lanzamiento del Sputnik al espacio y con el triunfo de las modas juveniles en Occidente. Estados Unidos trataba de imponerse en la geopolítica mundial al tiempo que un nuevo estilo de música, el rock and roll, sacudía los valores de una sociedad eminentemente conservadora. Los años 50 fueron el prólogo de los convulsos años 60 y las andanzas de este dúo son uno de los capítulos más recordados de la época.
Aunque se suele hablar de “la pareja de asesinos”, la mayor parte de la culpa por lo sucedido siempre ha recaído sobre Charles Starkweather.A ello contribuyó el estilo del hombre, que con un estilo parecido al de James Dean, inspiró varias películas, canciones y hasta libros. Todos estos productos culturales, por cierto, apostaron por el sensacionalismo barato. Aunque el grueso de la sociedad estadounidense crea saber lo que sucedió en realidad, únicamente los amantes del género true crime conocen los verdaderos hechos detrás de lo que conmocionó al Estados Unidos rural de la década de los 50.
UN ROMANCE RETORCIDO
Charles nació el 24 de noviembre de 1938 en Lincoln (Nebraska), en el seno de una familia de clase obrera. Era el tercero de siete hermanos y, observando su infancia y pubertad, nada podía sospechar del carisma y la frialdad que le caracterizarían después. Para empezar, sufría miopía no diagnosticada hasta los 15 años. Además, sacaba malas notas, tartamudeaba cuando hablaba en público y era patizambo. En resumen: carne de , aunque con los acosadores
