Dos mejor que uno
LA PRESENTACIÓN DE LOS NUEVOS FERRARI coincidió con el salón de Fráncfort, pero no tuvo lugar en el recinto alemán. Los dos biplazas vieron la luz en el circuito italiano de Fiorano, en un evento llamado “Universo Ferrari”. Esta exhibición estará abierta durante el mes de septiembre y hay diferentes áreas, tanto con modelos clásicos (incluyendo un 250 GTO) y de competición como las últimas novedades, entre ellas el híbrido SF90. Los nuevos 812 GTS y F8 Spider son por tanto la guinda del evento, las últimas joyas del mundo Ferrari. Cuando alguien compra uno de los coches de Maranello no solo se lleva un deportivo extraordinario, sino que también compra la satisfacción de, en cierto modo, formar parte de la leyenda. La gloria de Ferrari comenzó a forjarse en los años cincuenta y se consolidó en los sesenta, con corajudos pilotos al volante de barchettas o mono-plazas. Por tanto, la conducción al descubierto, con el viento acariciando el rostro, ha formado parte del universo Ferrari desde el principio. Y no solo en los circuitos. Pronto los millonarios vividores comenzaron a comprar modelos Ferrari, tanto para competir como para presumir. El más conocido de ellos fue el legendario playboy Porfirio Rubirosa, quien una mañana de julio de 1965 se mató al estrellar su Ferrari 250 Cabriolet contra un árbol, en los Campos Elíseos de París. No fue el único que cayó hechizado por los coches italianos, y otros seductores con estilo como Alain Delon o el director de cine Roger Vadim condujeron sus Ferrari California por la Costa Azul.
Aún no hay precio del 812 GTS, pero si el Superfast cuesta 339.000 euros, es lógico pensar en más de 400.000
Desde entonces un Ferrari Spider tiene un toque más frívolo y extrovertido que un modelo cerrado. Definitivamente no es para alguien que quiere discreción. Pero también es cierto que, si no lo descapotas, apenas se nota que
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos