CUANDO COMER ES UN RIESGO
Nadie duda de que comer es un placer, pero a veces también puede suponer jugarte la salud, y no nos referimos a comerte un yogur caducado, como recomendaba el exministro Arias Cañete, sino a una crisis alimentaria en toda regla, de las que copan telediarios y titulares de periódicos. Las crisis con las cosas del comer han tenido lugar a lo largo de toda la historia, no es nada nuevo; las más antiguas se reflejaban en los libros y las actuales en los medios de comunicación y redes sociales.
En España, la más reciente ha sido el brote de listeriosis que ha provocado tres muertos, varios abortos y que más de 200 personas tuvieran que recibir atención médica debido al consumo de carne infectada de la empresa Magrudis. Hemos tenido un verano calentito con la listeriosis y el botulismo en algunas latas de atún de la marca Día, además de una buena ración de, que contamina alimentos crudos y que, al consumirse, provoca síntomas como fiebre o diarrea. En principio no revisten gravedad, pero sí pueden ser más agresivos en mujeres embarazadas y ancianos, como lamentablemente ha sido el caso.
