La palabra mediocre me gusta y a la vez me parece que tiene connotaciones tan negativas que me sabe hasta mal usarla pero refleja muy bien la realidad del rendimiento (que no de la calidad como ser humano) de la persona.



Hoy vamos a hablar sobre ello en base al email que me enviaba un oyente del podcast sobre un compañero que podríamos ponerle esta etiqueta.



Esto es lo que me decía.



[…] El arranque y desarrollo del proyecto esta siendo bastante duro pero esto te lo comentare en otro momento xD, debido a que el proyecto se comenzaba desde cero y los responsables no estaban in situ conmigo, decidieron subcontratar a otra empresa para que una persona de la misma me ayudara con las tareas tres días a la semana. Todos sabemos que los comienzos son duros y que siempre nos cuesta aprender cosas nuevos, familiarizarnos con herramientas, etc, pero pasados casi 4 meses la situación con mi compañero es bastante desesperante. Aunque es cierto que el está atado de pies y manos por algunos trámites burocráticos todos los días le tengo que explicar las cosas 2 o 3 veces, es muy frustrante que después de 4 meses no sepa realizar tareas que le explicado desde el primer momento y en numerosas ocasiones. No se si realmente es que no quiere trabajar, que le cuesta asimilar conceptos o que simplemente le da igual todo pero a mí la situación me supera. A esto hay que sumarle que mi responsable me ha “hecho” responsable de estar persona para quitarse el muerto de encima. No me quiero extender mucho más por lo que voy a plantearte mi duda ante esta situación, ¿Debería tomarme esta situación como un reto y plantearme esto como un desarrollo en la “gestion” de personas por si el dia de mañana debido al trabajo que estoy desarrollando ahora es valorado y asi poder optar a un puesto mejor o por el contrario debería cortar por lo sano y comentarle a mi superior lo que ocurre para el que tome acciones más radicales? Muchas gracias por todo Saludos […]





La respuesta a su situación os la cuento en el episodio.



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Seguimos mañana con más para cerrar la semana.



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¡Hasta mañana!