Siempre nos han dicho que los polos opuestos se atraen. Pero, ¿hasta qué punto esto es cierto? Silvia Congost nos da algunas pistas para elegir a los compañeros y compañeras de vida perfectos, esos a los que no tenemos por qué cambiar. Pero más allá de elegir a las personas que compartirán nuestra vida, debemos saber quién es la persona que habita dentro de nosotros. Disfrutar de su compañía, de sus inquietudes y deseos, de su propósito vital. Pasar tiempo de calidad en soledad, hablarnos con compasión y respeto, volvernos a conocer en una primera cita. Seguro que volvemos a enamorarnos.