3 libros en 1: Manualidades para todos: macramé, crochet y amigurumi para principiantes

Por Silvia Sierra

¿QUIERES DISFRUTAR DEL MACRAMÉ, CROCHET Y AMIGURUMI Y HACER TUS PROPIAS OBRAS CON NUDOS O GANCHILLO?

 

En esta colección de 3 libros en 1 encontrarás todo lo necesario para disfrutar del universo del macramé, el crochet y el amigurumi.  En Macramé para principiantes aprenderás el arte de crear tejidos a través de nudos. Es una habilidad muy valiosa porque solo necesitas aprender a hacer nudos con tus manos para empezar a desarrollar diseños y crear objetos muy útiles para el día a día, para adornar cualquier lugar o para regalar.

 

En Crochet para principiantes conocerás la maravillosa historia del arte del crochet, aprenderás qué materiales necesitas y cómo seleccionar los mejores, así como los principales puntos para empezar a tejer, además de consejos y trucos para no cometer los errores más frecuentes y aprender más rápido.

 

En Amigurumi para principiantes descubrirás el arte de crear figuras o muñecos de crochet o ganchillo. Estas obras no son solo simples muñecos, sino amigos con alma propia que protegen, te aportan energía positiva y te recuerdan constantemente la necesidad de disfrutar de la vida y centrarte en lo que verdaderamente importa y te hace feliz.

 

Contarás con instrucciones paso a paso para crear una gran cantidad de diseños de cada una de estas disciplinas. Además, disfrutarás de los beneficios de estas actividades: aumentará tu concentración y tu capacidad mental, la creatividad, te relajarás, serás una persona más recursiva y paciente y adquirirás habilidades motoras finas.

 

En esta recopilación…

• Descubrirás qué es el macramé, el crochet, el amigurumi y su historia y evolución
• Descubrirás los materiales que necesitas para practicar estas disciplinas: agujas, hilos, marcadores, tijeras…
• Aprenderás los puntos más sencillos para empezar a hacer crochet y los nudos esenciales para el macramé (nudo plano, columna, cordoncillo, cadena, alondra, cavandoli…)
• Dispondrás de las instrucciones paso a paso para crear tus primeras obras: posavasos, gorro, tapete, corazón, granny square, sensual top, mochila, cesto, boina, suelas, coletero, camino de mesa, espejo, plumas, camino de mesa, colgantes para plantas… y divertidas figuras de amigurumi (oso, ballena, conejo, llaveros, calabaza, dinosaurio, tortuga, perro, jirafa)
• Identificarás los errores comunes y tendrás los mejores consejos para aprender de forma rápida

¡Estás a solo un paso de empezar a tejer estas maravillosas obras de macramé, crochet y amigurumi!

• Idioma: Español
• Editorial: Silvia Sierra
• Fecha de lanzamiento: 31 oct 2023
• ISBN: 9798215562185

Vista previa del libro

Todos los derechos reservados diciembre 2021

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MACRAMÉ PARA PRINCIPIANTES

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Introducción

Los diseños de macramé se hacen tejiendo y cruzando nudos, se pueden hacer con un solo tipo de nudo o con combinación de varios, ya que existen más de 50 tipos de ellos, pero en este libro vamos a tratar de realizar los diseños de la manera más sencilla posible.

La idea de este libro es que te resulte fácil hacerlo. Y que puedas diseñar por tu cuenta sin problemas, sin confundirte ni fracasando en el intento.

Empezaremos primero con los nudos más simples, y muchos diseños serán con ellos, para que puedas conseguir tus primeras obras de manera sencilla.

Para hacer macramé no necesitas instrumentos muy sofisticados, además no tienes que gastar mucho dinero en material. Solo necesitas el hilo, la tijera, una cinta métrica y ya está.

Los nudos básicos se clasifican en cuatro tipos, con estos nudos solos o combinados puedes hacer muchos diseños de variadas obras desde micromacramé (pulseras, pendientes, collares...) hasta diseños más grandes como hamacas, tapices, cabeceros de cama y demás.

Los nudos elementales para el macramé son:

Alondra

Plano

Festón

Espiral

Aunque el espiral no lo usaremos, veremos diseños sencillos para utilizar el resto de nudos.

Cuando hagas macramé, el consejo es que comiences con diseños sencillos, puede ser una pulsera, un posavasos o tapiz, donde uses nudos elementales.

Hacer maceteros es una gran alternativa para crear diseños. Recuerda que la magia de todo esto es que cada diseño tenga tu impronta, tu toque personal.

Si el diseño final lo ves un tanto extraño, que no es lo que esperabas, no te pongas triste, cada persona tiene su estilo particular. 

Así que no demos más vueltas y comencemos a crear, empezaremos con un poco de teoría, aprendiendo a hacer los primeros nudos, y en breve estaremos ya diseñando una gran cantidad de diseños que aprenderás a hacer en este libro. 

Capítulo 1: Qué es el macramé y materiales básicos para hacerlo

El macramé está cada día más de moda. Sin embargo, esta tecnología de decoración se ha utilizado durante miles de años. Debido a la cultura asiria y persa, el encaje apareció en el 2300 a. C. Pero fueron los árabes quienes llevaron esta tecnología a Europa y luego a los Estados Unidos.

Gracias a esta tecnología, este arte les da a muchos objetos un estilo ibicenco y chic, por ello se ha puesto de moda y aquí aprenderás a hacerlo.

El encaje es una técnica que combina nudos y trenzas para formar una tela que le da encanto a un objeto o ropa. En cuanto al material, la única condición es que sea un material duro y duradero, de lo contrario puede romperse al anudarlo. El encaje es una técnica decorativa que requiere esfuerzo, tiempo y paciencia, si lo ves muy difícil puedes adoptarlo como un rato, aunque aprender a hacerlo te brindará la oportunidad de relajarte y disfrutar.

Esta tecnología está de moda actualmente en Estados Unidos. Gracias al encaje, se pueden hacer muchas cosas con materiales resistentes a la intemperie como cuero, nailon, lona o yute. Además, se pueden hacer diferentes tipos de nudos o trenzas para que cada diseño sea más exclusivo. La hamaca se ha convertido en el objeto que quieren todas las personas que disfrutan de la diversión del macramé.

Clases de materiales

Como ya hemos visto, esta técnica se puede realizar con diferentes materiales, pero lo más importante es que el material sea resistente, para que pueda soportar la presión de anudar y tejer. Los hilos para tejer pueden ser de algodón, yute, lino, seda u otras fibras naturales, pero el algodón y la seda son los más utilizados.

Debes considerar el tipo de diseño a realizar y cómo utilizar el diseño para seleccionar el hilo más adecuado. En cuanto a los materiales necesarios para ayudarte a completar esta tecnología, aunque los elementos básicos que solemos utilizar de apoyo son lápices, varillas o palos, dependiendo de lo que se vaya a realizar.

Historia del macramé

Cuando se trata de macramé, se habla de anudar, se refiere al anudado decorativo diseñado para darle a una tela forma y textura, haciéndola lucir bella y hermosa. Este anudado solo se puede hacer a mano.

El primer dato histórico que se tiene de anudar, es para la acción de fijar piedras afiladas a palos de madera para hacer flechas y lanzas, para hacer que la caza sea efectiva. Más tarde los nudos se utilizaron para hacer rejillas, creando redes, mejorando la actividad pesquera y aumentando la cantidad de peces capturados en menos tiempo.

La red de pesca más antigua encontrada estaba hecha de sauces, con una historia que se remonta al 9000 a.C., ubicada en la ciudad de Karelia en Antria. En el Neolítico prehistórico del 8000 a.C., se han utilizado nudos planos y engobe para fabricar herramientas que les permitían cultivar la tierra, recolectar alimentos y tratar el ganado. Además, comenzaron a fabricar telas que cubrían el cuerpo, utilizando cualquier cuerda orgánica disponible (una especie de nudo de fibra vegetal) para proteger el cuerpo. Como única herramienta disponible, esta tecnología se estableció como uno de los primeros métodos de fabricación textil.

Estos tejidos anudados son los pioneros en la creación de telares y telas. Sin anudar, es imposible satisfacer estas necesidades básicas. Como sabemos hoy, estos nudos primitivos y remotos son el primer precedente del encaje. Sorprendentemente, en diferentes lugares de la Tierra, durante el período en que cada cultura se aisló de otras culturas que vivían en otras regiones o continentes, hubo muestras de nudos similares. Muchas civilizaciones dotan a los nudos de significado y misterio, y les otorgan identidades.

Es por ello que podemos encontrar diseños celtas, chinos, japoneses, etc. en la gama de nudos. El anudado es una de las primeras expresiones culturales de la humanidad. Es socialmente indispensable en muchos tipos de trabajo manual. El proceso de anudado, no fue en un principio una simple decoración, sino una respuesta a otros usos. El comportamiento consciente de anudar tiene un profundo significado simbólico.

Las culturas más diversas lo ven como un comportamiento heredado del pasado, presente y futuro. Ahora, cuando las personas finalmente satisfacen sus necesidades básicas, estos nudos comienzan a usarse de forma decorativa.

Capítulo 2: Pasos básicos para aprender a hacer macramé

Este arte de tejer y trazar tiene una serie de pasos elementales que tienes que conocer, estos nudos elementales los usaremos a lo largo de diversos diseños, así que aprende bien estos nudos para que luego a la hora de ponerte manos a la obra, puedas hacer macramé con éxito y rapidez. Veamos cómo se hacen:

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Nudo plano

Se colocan 4 hebras en el portanudos. Se coge la del extremo derecho y se pasa por encima de las dos hebras centrales, y por debajo de la del extremo izquierdo. Se hace lo mismo con la del extremo izquierdo (se pasa por encima de las dos centrales y por debajo de la del extremo derecho). Se desplaza el nudo para colocarlo a la altura donde quieres que acabe. Se repiten los mismos pasos, ahora empezando por la del extremo izquierdo. Se estira de los dos extremos para apretar el nudo y que quede bien fijado, tirando de los dos lados a la misma vez y con la misma fuerza.

Nudos planos alternados

Debes montar el portanudos con un número de hebras que sea múltiplo de 4 y hacer filas de nudos planos en sentido horizontal.

En la segunda línea, dejas las dos primeras hebras y haces una fila con nudos planos, usas un par de hebras que son del primer nudo plano de la línea superior y dos hebras del nudo que sigue.

Columnita retorcida

Coloca el portanudos con una cantidad de hebras múltiplo de 4 y haces una fila de nudos planos en sentido horizontal y repites varias veces el cruce de las hebras del nudo plano.

Nudo bolita

Después de hacer los nudos planos doblas un par de hebras centrales desde delante hacia atrás, por medio de 4 hebras, cierras el nudo plano teniendo hebras centrales.

El nudo llano

Procede a sujetar la hebra portanudos, toma una hebra de anudar y la doblas en dos, haces pasar la lazada de arriba abajo, por debajo de la hebra portanudos, toma los dos cabos de la hebra y lo haces pasar por encima de la hebra portanudos, lo metes en la lazada, aprietas, así va tomando forma el tejido. Ahora pasa un ganchillo por medio del borde de la tela, engancha la hebra, la doblas en dos, la sacas de la tela y la pasas en la lazada los dos cabos de la hebra.

Nudo sencillo

El nudo sencillo lo puedes hacer con la guía derecha o izquierda, para el primer caso es bueno hacerlo en sentido vertical, con la mano izquierda, la hebra de la izquierda hace la función de hebra portanudos. Lo vuelves a llevar por debajo de la misma y por encima de la hebra que forma anillo. Deslizas la hebra anudadora sobre la hebra portanudos, cierras el nudo. Para el segundo caso, se hacen las mismas operaciones en sentido contrario.

Cordoncillo horizontal

Coloca el número de hebras necesarias, ahora anudas cada una con un nudo sencillo un par de veces, usas de portanudos la primera hebra de la izquierda en el caso del cordoncillo que vaya de izquierda a derecha, la primera hebra de la derecha en el caso contrario. El portanudos tiene que quedar horizontal y cada uno debe estar lo más apretado que se pueda, teniendo en la mano el extremo libre de la hebra portanudos.

Cordoncillo oblicuo

Se hace como con el horizontal, pero teniendo la hebra portanudos en sentido oblicuo. Una mano está sujetando la hebra portanudos, con la otra se hacen los nudos.

Ahora se hace un cordoncillo oblicuo de izquierda a derecha con la mitad de las hebras montadas, repites la operación de derecha a izquierda, con la misma inclinación al centro.

Vuelve a la diagonal de izquierda a derecha, anudas todas las hebras con la misma inclinación, partes ahora del centro y terminas el cordoncillo de derecha a izquierda.

Pequeña cadena

Se logra con la realización consecutiva de pequeños nudos alternados, uno a la derecha y el otro a la izquierda.

Cadena doble

Se hace del mismo modo que la cadena pequeña, pero usando dos pares de hebras o más.

Cadena de tres hebras

Para poder hacerlo se necesitan tres hebras, de las cuales, una es la central, que queda inmóvil y tensada, sobre ella se hacen nudos sencillos, se alterna y trabaja una vez con la hebra de la derecha y otra vez con la izquierda.

Nudo plano

Se hace con cuatro hebras, pero también se puede hacer con seis. Se mantienen inmóviles las tres hebras del centro, luego con la de la derecha formas un anillo encima de las dos hebras centrales y por debajo de la izquierda.

Para poder pasar la hebra de la izquierda por debajo de las hebras del centro y dentro del anillo, de abajo arriba, tira de la primera y de la cuarta hebra a la vez y crece el cruce hacia arriba.

Toma la hebra de la izquierda y haz con ella un anillo, pasa por encima de las hebras centrales y por la derecha, pasa la hebra de la derecha por debajo de las hebras centrales y dentro del anillo de la izquierda para hacerlas correr para arriba.

Cadena de nudo

Piquito en anillo

Se logra por medio de una trenza de nudos planos, luego se hacen dos nudos planos a una determinada distancia, los acercas, y el trozo de hilo que queda entre un nudo y otro forma un piquito.

Cadena doble con festón alternando

Monta dos pares de hebras, las dos hebras centrales se tienen que mantener tensas. Se hacen cuatro nudos de festón en cada lado, primero con la hebra de la izquierda y después con la derecha, de modo alternativo.

Cadenas unidas entre si

Después de montar dos grupos de cuatro hebras, se hacen nudos en cada grupo, dejando la hebra anudadora un poco más larga. Entre un nudo y otro, se forman unos piquitos que, entrelazados en el proceso paralelo a la otra cadena, con la cadena de al lado permiten la unión en dos cadenas.

Inicios de decoración

Inicio de piquitos

Vas a doblar las hebras en dos y las sujetas al soporte en el centro de la lazada con un par de alfileres a una distancia uniforme. Extiendes encima de las hebras, en sentido horizontal, la hebra portanudos sujeta en un extremo con un alfiler, anudas las hebras una a una, a cordoncillo recto.

Inicio de nuditos

Vas a hacer el nudo en el centro de la lazada en cada hebra y sujetas con un alfiler, repite esto en cada hebra a montar, extiende horizontalmente la hebra portanudos y en ella, anudas el cordoncillo recto a las hebras verticales.

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Inicio de piquitos y nudos planos usando alfileres

Sujeta las hebras dobladas en dos en grupos de dos, haces un par de nudos en cada grupo, extiendes horizontalmente la hebra portanudos y anudas. Cuando lo haces, pones las hebras verticales.

Inicio de flor

Vas a preparar hebras dobladas en dos, reúne en grupos alternos de 3 y 2 y sujetas con alfileres. En los grupos de tres, la hebra del centro se coge cerca de medio centímetro más arriba. Haz un nudo en cada grupo de tres. La primera hebra y la sexta se anudan sobre las cuatro del centro, se extiende después horizontalmente la hebra portanudos y anudas todas las hebras en vertical a cordoncillo recto.

Inicio de festón de nudos sencillos

Monta en la hebra portanudos tres hebras dobladas en dos, toma las hebras del primer par y haz una serie de nudos en modo de festón, cuando alcances el ancho deseado, cierra el cordoncillo recto en la hebra portanudos.

Inicio de arcos

Prepara varias hebras y luego las doblas por el medio, las pones en arcos formados por tres pares de hebras cada uno, sujetas con alfileres, sujetas la izquierda por medio de una lazada pegada al soporte con un alfiler y anudas en ella con cordoncillo recto todas las hebras, procedes de izquierda a derecha.

Decoración en zigzag

Se hacen grupos de vueltas horizontales y verticales. El motivo resultante es agradable, tanto en un solo color como en varios, se recomienda montar por lo menos cuatro grupos de hebras de ocho cabos.

Para cada vuelta horizontal, utilizar como portanudos la primera hebra y anudas una a una todas las hebras, haces cuatro cordoncillos dejando cada vez en suspenso la hebra portanudos.

Ahora toma la hebra portanudos del primer cordoncillo horizontal y luego de haber fijado con un alfiler, la doblas verticalmente para abajo, haces nudos verticales usando como anudadores las hebras portanudos que se habían dejado