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Hombre Y Sexo: La Respuesta Sexual Masculina Y Sus Disfunciones
Hombre Y Sexo: La Respuesta Sexual Masculina Y Sus Disfunciones
Hombre Y Sexo: La Respuesta Sexual Masculina Y Sus Disfunciones
Libro electrónico257 páginas3 horas

Hombre Y Sexo: La Respuesta Sexual Masculina Y Sus Disfunciones

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Información de este libro electrónico

La sexualidad humana inicia con la fecundacin y termina ms all de la muerte del ser humano.
Los hombres tenemos la posibilidad de recibir permanentemente estmulos tanto externos- por medio de nuestros sentidos- como internos a travs de fantasas, sueos o pensamientos, que nos generan lo que se llama la RESPUESTA SEXUAL MASCULINA, que es el sentir el deseo o impulso de vivir un encuentro sexual ya sea con nosotros mismos o con alguna (as) otra(s) persona (s). Esta respuesta sexual se manifiesta por cambios en los signos vitales, en nuestros genitales y reas extra genitales, es decir, en todo nuestro cuerpo fsico, emocional, afectivo y espiritual.
En este libro se mencionan los cambios mencionados en las etapas del hombre y se describen las disfunciones sexuales masculinas: trastornos del deseo sexual, la disfuncin erctil y la fisiopatologa de las disfunciones eyaculatorias, enfatizando en la eyaculacin precoz, rpida o ltimamente llamada involuntaria. Incluye las causas tanto orgnicas como psicolgicas de estos padecimientos y lo ms importante, la manera de solucionarlos.
IdiomaEspañol
EditorialPalibrio
Fecha de lanzamiento23 ene 2014
ISBN9781463359577
Hombre Y Sexo: La Respuesta Sexual Masculina Y Sus Disfunciones

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    Hombre Y Sexo - Dr. Albino Contreras Sánchez

    Copyright © 2014 por Dr. Albino Contreras Sánchez.

    Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida o transmitida de cualquier forma o por cualquier medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación, o por cualquier sistema de almacenamiento y recuperación, sin permiso escrito del propietario del copyright.

    La información, ideas y sugerencias en este libro no pretenden reemplazar ningún consejo médico profesional. Antes de seguir las sugerencias contenidas en este libro, usted debe consultar a su médico personal. Ni el autor ni el editor de la obra se hacen responsables por cualquier pérdida o daño que supuestamente se deriven como consecuencia del uso o aplicación de cualquier información o sugerencia contenidas en este libro.

    Fecha de revisión: 14/01/2014

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    ventas@palibrio.com

    476097

    ÍNDICE

    Dedicatoria

    Currículum vítae del doctor Albino Contreras Sánchez

    Prólogo

    Introducción

    PRIMERA PARTE

    1   His toria

    2   Concepto

    3   Tipos de respuesta sexual masculina

    3.1. Respuesta sexual in útero

    3.2. Respuesta sexual del recién nacido

    3.3. Respuesta sexual en la infancia

    3.4. Respuesta sexual en la pubertad

    3.5. Respuesta sexual del adolescente

    3.6. Respuesta sexual del adulto

    3.7. Respuesta sexual en la tercera edad

    4   Fases de la respuesta sexual masculina

    4.1. Fase de excitación

    4.2. Fase de meseta

    4.3. Fase de orgasmo

    4.4. Fase de resolución

    SEGUNDA PARTE

    1   Disfunción sexual en el hombre

    2   Disfunción en el deseo sexual

    3   Deseo sexual hipoactivo (disminuido) o inhibido

    3.1. Etiología

    3.2. Tratamiento

    4   Aversión sexual

    5   Deseo sexual hiperactivo

    6   Disfunciones sexuales masculinas de las fases de excitación y meseta

    6.1. Disfunción eréctil

    6.1.1. Factores de riesgo en la disfunción eréctil

    6.1.1.1. Síndrome metabólico

    6.1.1.1.1. Relación del síndrome metabólico y el hipogonadismo

    6.1.1.1.2. Tratamiento

    6.1.1.2. Enfermedades cardiovasculares

    6.1.2. Fisiología de la erección

    6.1.3. Fisiología celular de la flacidez y la erección

    6.1.4. Anatomofisiología de la erección

    6.1.5. Fisiopatología de la disfunción eréctil

    6.1.6. Etiología de la disfunción eréctil

    6.1.6.1.Vasculares

    6.1.6.2. Neurogénicas

    6.1.6.3. Hormonales

    6.1.6.4. Psicógenas

    6.1.6.5. Otras causas

    6.1.7. Depresión y disfunción eréctil

    6.1.8. El diagnóstico en la disfunción eréctil

    6.1.9. El tratamiento en la disfunción eréctil

    6.1.9.1. Disfunción eréctil psicógena

    6.1.9.2. Disfunción eréctil orgánica

    6.1.9.2.1. Tratamiento oral

    6.1.9.2.2. Otros tratamientos

    6.1.9.3. Disfunción mixta: psicógena y orgánica

    6.1.10. Lo actual en el tratamiento de la disfunción eréctil

    6.1.11. El futuro en el tratamiento de la disfunción eréctil

    6.1.12. Impacto en el paciente con disfunción eréctil

    6.2. Priapismo

    6.2.1. Etiología

    6.2.2. Diagnóstico

    6.2.3. Tratamiento

    6.2.3.1. Tratamiento médico

    6.2.3.2. Tratamiento quirúrgico

    7   Disfunción eyaculatoria

    7.1. Etiología

    7.1.1. Alteraciones neurológicas

    7.1.2. Alteraciones anatómicas

    7.1.3. Alteraciones uretrales

    7.1.4. Alteraciones psicológicas

    7.2. Aneyaculación

    7.3. Eyaculación retrógrada

    7.4. Eyaculación asténica

    7.5. Eyaculación dolorosa

    7.6. Eyaculación refleja

    7.7. Eyaculación retardada

    7.8. Eyaculación anhedónica

    7.9. Eyaculación precoz

    7.9.1. Etiología

    7.9.2. La eyaculación precoz y el impacto emocional en el paciente, su pareja y su relación

    7.9.3. Diagnóstico

    7.9.4. Tratamiento

    7.9.5. Abordaje psicológico

    7.9.5.1. Terapia sexual

    7.9.5.2. Terapia de pareja

    7.9.6. La ansiedad y la depresión en la disfunción sexual

    7.9.7. Tratamiento integral

    7.9.8. Tratamiento actual

    7.9.9. Pronóstico

    Epílogo

    Bibliografía Primera Parte

    Bibliografía Segunda Parte

    DEDICATORIA

    Este libro, mi primer hijo de papel, lo dedico a mis hijos biológicos, que representan una enorme motivación y alegría en mi vida, y son mis grandes maestros: Nadia Michelle, hermosa tanto en su interior como en su exterior, con una gran inteligencia y maestra del silencio oportuno; y Christian Omar, con su impresionante inteligencia social y honestidad, incansable deportista y campeón del buen humor y la sonrisa, como su hermana. A Delia Guadalupe, mi amada esposa, de quien he aprendido la frescura, la sencillez y la manera práctica de vivir el aquí y el ahora; así como a sus padres, hermanos y familiares. A mis hermanas: Rosa Nélida, Ofelia y Martha Elba, a quienes agradezco su apoyo desde mis primeros años de vida hasta el momento actual y admiro por su dedicación a sus familias, esposos, hijos y nietos, con quienes he disfrutado muchos momentos de regocijo y placer. A mi compadre y gran amigo el doctor Gabino Cárdenas Olivares, que con gran maestría, dedicación y profesionalismo revisó este texto y escribió el prólogo, le agradezco profundamente. A la memoria de mi ahijado y sobrino Sergio Eduardo, que con gran cariño revisó y ordenó el texto; ahora se encuentra eternamente en otra dimensión. A su compañera de la vida, Alejandra, a quien agradezco su apoyo; al doctor José Armando Lozano Buenrostro; a mis amigos Rosana, Rocío, Consuelo, Marisol, Heriberto, Víctor, Mariela, Carolina, Gerardo; a la doctora Adriana, quien me sugirió el título del libro; al doctor Lucio; a mi asistente, Martha Noelia; y a mi socio y amigo, el doctor Ignacio Villagomez. A mis pacientes, que me han dado la oportunidad de aplicar estos conocimientos en sus consultas y han incrementado mi experiencia. Por último, y de manera muy especial, a la memoria de mis padres, señora Graciela Sánchez Vargas y señor Albino Contreras Mendoza, que se encuentran en otra dimensión: a ellos debo mis cimientos como ser humano por su modelaje de honestidad, perseverancia, trabajo duro y lealtad, que ahora sus hijos hemos retransmitido a nuestros propios hijos.

    Descripción: C:\Users\Albino\Pictures\Fotografias\DR ALBINO\torre medica neruda (30 of 57).jpg

    Dr. Albino Contreras Sánchez

    CURRÍCULUM VÍTAE DEL DOCTOR ALBINO CONTRERAS SÁNCHEZ

    El doctor Albino Contreras Sánchez nació en la madrugada del 19 de agosto de 1951 en el rancho El Taray, municipio de Tamazula, en el sur del estado de Jalisco, México, donde cursó su enseñanza básica. Estudió Medicina General en la Facultad de Medicina de la Universidad de Guadalajara y se especializó en Urología en el Instituto Mexicano del Seguro Social de la misma ciudad, donde cursó varios adiestramientos en: Microcirugía, Urología Ginecológica, Urología Pediátrica, Endourología y Cirugía Percutánea, así como Cirugía Laparoscópica. Terminó sus labores como cirujano urólogo de base del Seguro Social, donde se jubiló, y actualmente ejerce la medicina privada.

    Fuera de la urología, ha incursionado como terapeuta, ya que terminó las maestrías de Educación Sexual, Terapia Gestalt, Programación Neurolingüística, Terapia Sexual y de Pareja, e Hipnosis, y actualmente está cursando las maestrías de Habilidades del Terapeuta, de Creatividad en Terapia y de Biodecodificación.

    Disfruta bastante de practicar natación, tenis, yoga, meditación, caminata y lectura.

    PRÓLOGO

    La sexualidad tiene principal importancia en la constitución del ser humano, debido a que es la dimensión más íntima y sensible de todas las que lo conforman. Toda persona es sexuada por naturaleza, con predominancia de uno de los dos géneros en cada individuo: el femenino o el masculino. El manejo personal de la sexualidad individual invariablemente tiene repercusiones en los ámbitos familiares, sociales y laborales, porque construye la identidad y la imagen en la relación con los otros, ya que la sexualidad está teñida por los colores que la cultura y el entorno imponen a sus miembros para permitir su expresión o reprimir sus manifestaciones.

    Su historia refiere que, en su origen, tenía un carácter eminentemente reproductivo, al igual que en los demás seres sexuados de la naturaleza, y que con el paso del tiempo, una vez que las economías y culturas confluyeron en sistemas políticos, la sexualidad fue utilizada también como forma de control de las conductas sociales. Así, siendo una vivencia eminentemente personal e íntima, se estableció como puente para el control social a partir de las permisiones y prohibiciones que la cultura predominante establecía para los individuos que la asumían por pertenecer a ella y vivir de acuerdo con sus normas y valores.

    En Occidente, en la cultura griega y en la romana, podemos encontrar toda una expresión religiosa de la sexualidad, incluso colectiva, en las fiestas en honor del dios Baco o Dionisio, con un culto al cuerpo y a la belleza de su perfección. O bien, en el Medio Oriente, hallamos la represión y el castigo a las expresiones sexuales colectivas y fuera de la institución matrimonial bendecida por Dios. Esta segunda perspectiva es una visión religiosa que impregnó a un tipo de cristianismo ―el maniqueo― en esta misma concepción sobre la sexualidad y miró el cuerpo como causa de pecado. En todo contexto, la concepción sociocultural de la sexualidad también constituye a los individuos como hombres y mujeres con la asunción de los comportamientos que se implican como socialmente aceptados.

    Si bien hubo períodos y culturas que propiciaron la equidad sexual, la historia nos dice que, en la mayoría de ellos, la exaltación de la sexualidad se otorgó principalmente al varón, considerado como el miembro activo y fuerte de la relación. Simbólicamente, el falo representa el cetro del poder, por lo que el control de la sexualidad fue histórica y culturalmente dado al hombre, y la mujer pasó a segundo término como receptora pasiva de la actividad sexual para convertirse en el «sexo débil» sometido al poder del hombre y a la represión cultural de su propio placer.

    Así, durante cientos de años, el placer sexual le perteneció exclusivamente al varón, a quien le fue permitida la expresión abierta de su sexualidad; no así a la mujer, que dependía de la voluntad del hombre para su goce y disfrute. La mujer «decente» no debía sentir placer sexual, y si lo hacía, no tenía que expresarlo. Solamente las prostitutas podían ejercer abiertamente la sexualidad, pero en beneficio de los varones y condenadas a la proscripción de su ejercicio y al oscurantismo y sufrimiento de su marginación social.

    El gran médico austriaco Sigmund Freud (1856-1939), creador del psicoanálisis, en medio de una época crítica para la humanidad, descubrió que la constitución personal de la sexualidad tiene una importancia clave para la salud. Sostiene que al principio de placer le sobreviene el principio de realidad y que los sufrimientos se derivan del sentimiento de culpa causado por la cultura con la represión de las pulsiones. La naturaleza propia de lo sexual tiende a expresarse biológicamente por sus propias pulsiones acorde al desarrollo evolutivo de los individuos, por lo que hay una alta probabilidad de que la represión irracional de la sexualidad y del deseo sexual pudiera ser una causa fuerte de trastornos psíquicos y somáticos. Por tanto, el estudio de la fisiología sexual y de la importancia de sus manifestaciones en el ser humano es indispensable en la medicina para contribuir a la salud física y mental de las personas.

    Aun con los descubrimientos freudianos sobre la sexualidad y los fundamentos de que no existe disposición biológica sexual ni para la «pasividad» femenina ni para la «actividad» masculina, todavía en los siglos XX y XXI pesa en las sociedades la herencia de inequidad sexual. Sin embargo, la evolución del pensamiento humano también ha impactado en las concepciones sobre la sexualidad en los últimos noventa años. Más allá de la religión, de la moral y del control sociopolítico, los estudios científicos han propiciado el reconocimiento de la igualdad en el derecho a la expresión sexual en hombres y mujeres, aunque no ha sido fácil llegar a esto en el transcurso de los años.

    El doctor Albino Contreras Sánchez, autor de este libro, señala con atingencia los estudios de los doctores William H. Masters y Virginia Johnson, Helen S. Kaplan, Shere Hite y Alfred Kinsey, entre otros, que fueron realizados entre los años 1920 y 1980, y hasta la fecha han servido de base a la sexología como ciencia médica. Sigmund Freud y Wilhelm Reich son también dos científicos cuyos aportes han de ser considerados en un estudio completo sobre la sexualidad y la constitución de la personalidad humana.

    Como contemporáneos de la segunda decena del siglo XXI, cabe preguntarnos qué tanto hemos avanzado en la equidad sexual, en la asunción de la complementariedad de los sexos, en reconocer la importancia que tienen las emociones y los sentimientos en el equilibrio o desequilibrio sexual. También qué tanto hemos avanzado en la aceptación social de la sexualidad y de sus manifestaciones, y en la cultura de la aceptación abierta de las disfunciones sexuales masculinas y de su tratamiento clínico. Me atrevo a responder que muy poco.

    Considero que, si bien es cierto que cualquier cultura es determinante de la conducta individual y social, también es cierto que el pensamiento cultural se modifica a partir de personas que se atreven a pensar diferente a lo establecido, del pensamiento de aquellos que rompen con las tradiciones férreas, generan nuevas perspectivas de entender la realidad, asumen comportamientos marginales y por eso son rechazados socialmente, pero que poco a poco llegan a ser aceptados por más y más personas hasta que se vuelven parte de la cultura social, que ahora los cataloga como normales, es decir, ubicados dentro de la norma. En este sentido, los individuos pueden generar cambios culturales mediante sus prácticas individuales. Así ha sucedido a lo largo de la historia. Son los individuos atrevidos quienes han cambiado los determinismos culturales; quienes han modificado la historia son los que han pensado que al considerar alternativas diferentes a las predominantes se abren puertas no imaginadas ante los problemas que parecen incólumes e indestructibles.

    Independientemente de estar o no de acuerdo con la equidad sexual entre hombres y mujeres, en una cultura machista ―todavía la mayoría de las culturas― hay un conjunto de beneficios y cargas que el varón tiene que llevar sobre sí mismo. Una de esas cargas es ser el «activo» sexual. Al haber heredado la responsabilidad de la iniciativa sexual, del poder y de la potencia en la relación, así como el control de ella, el varón asume culturalmente que «tiene que» cumplir, demostrar que él puede y funcionar como se espera de él. Sin embargo, cuando esto no sucede, cuando no cumple con las expectativas sobre lo que se espera sexualmente de él, puede caer en una condición de riesgo de salud psicológica y somática. ¿Por qué? Porque en la sociedad machista, el hombre difícilmente puede expresar que padece alguna disfunción sexual, lo cual agrava su estado de ánimo con consecuencias sobre su vida de pareja ―si la tiene―, sobre su familia y su trabajo, no por la disfunción en sí, sino por las reacciones de conducta que desencadena el estado de ánimo que ella le genera. De ahí la necesidad de atención temprana y oportuna cuando se presenta algún tipo de disfunción sexual masculina, para evitar caer en confusión y en un psiquismo de posibles reacciones riesgosas.

    La autoconcepción y la autoestima merman con una disfunción sexual. Ante esta situación, el papel del médico adquiere una importancia relevante para el tratamiento y la curación. Por ello, el doctor Albino Contreras insiste en la dimensión psicológica y emocional del paciente, porque en toda terapéutica integral es necesario considerar sus aspectos psíquicos, ya que de ellos emana en gran parte el problema y en gran parte la solución, incluyendo, por supuesto y de manera indispensable, los fármacos propios para cada caso.

    Según los datos que nos da el doctor Contreras en este libro, las disfunciones sexuales son mucho más frecuentes de lo que pensamos, es decir, podría considerarse que son algo normal. Las estadísticas se derivan de las consultas clínicas, con lo que puede inferirse que los porcentajes son mucho más elevados que los señalados en el texto. Por tanto, si un hombre padece una de ellas, no hay que temer, hay alternativas de solución. Lo importante es acudir a la brevedad con el especialista para iniciar el tratamiento y recuperar más pronto que tarde la salud, y que su vida sexual vuelva a la normalidad.

    Este libro no solo debe ser leído exclusivamente por los varones, también ha de ser abordado por las mujeres, ya que el autor lleva paso a paso la exposición

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