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[ Gestión ]
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Has pedido varios presupuestos para pintar su piso. Hay dos que te convencen, pero la diferencia de precio es significativa. Le preguntas al más caro por el precio y el profesional argumenta: “Usamos pinturas ecológicas y antialérgicas, limpiamos todo después de acabar y ofrecemos un seguro de un año, en el que nos comprometemos a repintar si la pintura pierde intensidad”. ¿Por cuál te decantarías tu? Optamos por el más caro, porque valoramos aspectos como calidad, servicio, compromiso… Pero no todos los clientes eligen siempre la propuesta más cara o la no menos barata. ¿Cómo defenderías el precio de tu producto y/o servicio cuando el cliente te pide una rebaja, porque tus competidores sí lo hacen?
No debes centrar tus argumentos de venta en el precio en sí mismo, sino en el valor real y en el percibido por el cliente. Parece fácil, pero no lo es. ¿Y por qué? Porque necesitas saber cosas como qué haces, para qué sirve, qué coste tiene, cómo