La elegancia trasciende de una generación a otra, cada una la transforma a su manera en los tiempos en los que vive. Es así como este concepto del buen gusto y la distinción del vestir sigue vigente. ¿Acaso se puede hablar de un prototipo de traje de oficina en la actualidad? Antes era el conjunto chaqueta y corbata, para ellos. Las mujeres se cortan con otra tijera. Alison Lurie, en su libro The Language of Clothes, habla del traje masculino como la rectangularidad que muestra estatus económico y social; mientras que el femenino se enfocaba a la redondez: la función maternal.
La modernidad se ha visto revolucionada por varios factores y hoy podemos hablar de una idea del vestir muy diferente. Es por que ello que –en este número– Forbes congrega una lista de personalidades en la que hay quienes ven en la corbata y los zapatos lustrosos el sinónimo del estilo corporativo y aquellas que prefieren la comodidad y una actitud relajada como nueva actitud empresarial.
El código de vestir se ha abierto. La elegancia se ajusta a las oficinas, los espacios privados del hogar o los heterogéneos coworkings; vestir para toda ocasión sin perder el porte. A esto hay que añadir la cuestión digital. Tal vez el futuro de la elegancia esté enfocado en el diseño de nuestro próximo avatar (o quizá una IA sea la responsable de crear esa perfecta imagen, esa primera impresión inolvidable… antes de desvanecerse en el flujo del contenido virtual).
Pero hoy estamos aquí y ahora; y nuestros escogidos sobresalen elegantemente sobre otros por su discreción, su apabullante carrera profesional, su manera de mantenerse presentes y de destacar entre sus pares. Para estas personas, la elegancia es sacar lo mejor de ellas mismas.
JUAN ABARCA
Presidente de HM Hospitales
Este salmantino con vocación de sanar a los demás se graduó con notas sobresalientes en Medicina y Cirugía en la Universidad de Salamanca. Su temple y carácter le concedieron cumplir uno de los sueños de sus progenitores: ser militar (lo consiguió al aprobar las oposiciones para Médico Militar del Ejército del Aire). En este entorno se doctoró en Cirugía Hepatobiliar y Pancreática con la calificación . Fue el primer médico castrense que trabajó en la Seguridad Social, al aprobar las pruebas públicas de la institución, en la que con posterioridad conseguiría ser médico cirujano de
