En los pasillos del Foro 11 de Televisa San Ángel, Livia Brito se pasea en pants y camisones hol-gados mientras espera su turno para grabar la telenovela Minas de pasión. En esos mo-mentos se despoja de su personaje justiciero y se divierte a montones con sus compañeros del elenco. Lo que más le gus-ta hacer: tiktoks. Se apren-de rápido las coreografías e improvisa para que los videos queden perfectos. Sin duda es una Livia distinta a la que mu-chos podrían conocer.
“ANTES ME PREGUNTABA POR QUÉ NADIE SE ME ACERCABA”
Su camerino tiene un sofá, un espejo y una pequeña mesa en la que se encuentra la bolsa de su ¡Es inmen sa! Tiene comida para todo el día y suficien-te agua como para no caer enCon una peluca de cabello corto y pupilentes verdes pa-rece otra, aunque eso sí, más seductora que de costumbre. Al encender nuestra grabadora, la actriz revela que al igual que su personaje en el melodrama que produce Pedro Ortíz, ella también se ha sometido a cam-bios muy drásticos. “Todo el tiempo me renuevo, gracias a Dios, siempre estoy disfrutando de la vida, de lo que me da, de las cosas buenas y malas, todo lo disfruto porque de todo se aprende y la vida es como una escuela, así lo han dicho mis pa-dres y tienen toda la razón del mundo, pasas una hoja y vas aprendiendo cosas nuevas”.