S TEFAN SIELAFF TRABAJA en una oficina relativamente pequeña en la planta baja del centro de diseño de Geely, en la pintoresca ciudad de Gotemburgo (Suecia). No hay una vista que valga la pena mencionar, no hay un acogedor salón adyacente, ni un monitor de gran formato que actúe como lienzo digital. La ambientación es atemporal, los únicos adornos son algunas exhibiciones que documentan su historia creativa y su amor por el arte moderno. Agrupados, tres elementos reflejan la nueva conciencia del exjefe de diseño de Bentley sobre la cultura china: un abanico hecho de papel de arroz, una lámpara sobre un pedestal pintado con laca tradicional y un juego de té de porcelana. También hay un maneki-neko, el característico “gato de la suerte” japonés, agitando la pata; originalmente nipón, también es popular en toda China.
En lugar de un modelo a escala de su propio automóvil, un Porsche 911 Targa azul, un Zeekr 001 comparte el primer lugar en la vitrina junto
