Bigbox fue fundada en el año 2009 en Buenos Aires por Gastón Parisier, pero con el correr de los años se fue transformando. Cuando nació se enfocó en ofrecer una solución alternativa en el mercado de regalos corporativos de Argentina. “Aunque los consumidores finales podían comprar, al inicio no teníamos ecommerce ni tiendas, tocábamos puerta por puerta de las empresas. Teníamos claro que íbamos a terminar en el consumidor final pero era más eficiente y económico empezar por las compañías”, recuerda André Parisier, CEO de Bigbox y hermano del fundador.
Por aquel entonces, Gastón estaba obsesionado con el packaging. “Prestaba especial interés en la aplicación de las lacas, en el relieve de la caja y hasta en cómo estaba ubicada la tarjeta adentro. Hoy, las ventas físicas representan solo el 20%”, señala el CEO de la compañía