Jack Pinho se lanzó hacia la línea de meta consciente de que si no lo hacía se arrepentiría de ello el resto de su vida. A sus 26 años, había trabajado sin descanso para conseguir romper la barrera de los 4 minutos en la milla. Fijó la mirada en el marcador, y cuando su nombre finalmente apareció junto a la marca 3:59,54, levantó las manos en señal de victoria.
“Había visto a otra gente lograrlo muchísimas veces”, afirmó, “pero en esa ocasión era mi nombre el que aparecía en aquel marcador”. Pinho fue el último hombre en recorrer una milla en menos de 4 minutos aquella noche del 11 de febrero en el David Hemery Valentine Invitational de la Boston University. Cincuenta y un hombres lo habían conseguido ya ese día, una cifra asombrosa en comparación con la de años anteriores. En 2022, doce hombres rompieron la ansiada barrera de los 4 minutos en ese mismo encuentro. Y cinco años atrás, únicamente siete lo consiguieron.
Este incremento tan significativo llevó a afirmar a el gran guardián de las estadísticas en este deporte, que las nuevas zapatillas “han bombardeado hasta tal punto la barrera de los 4 minutos que ya no tiene sentido seguir contabilizando esos éxitos”. Pese a estas afirmaciones, la milla en menos