Antes que un nombre de mujer, prudencia es una virtud, una potencia, una fuerza que actúa o puede actuar. “Así –dice André Compte-Sponville– la virtud de un medicamento es sanar, la de un cuchillo, cortar, y la de lo humano, la voluntad de actuar humanamente”. La virtud o las virtudes son, en este último sentido, la expresión de la moral. Por desgracia, ambas no tienen hoy buena prensa. Pocos hablan de virtudes –una palabra envejecida– y la moral parece haberse vuelto “un árbol que da moras”, como dijo un imbécil. Si aún apelamos a ella es sólo
PRUDENCIA
Jun 12, 2023
3 minutos
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos