Desde el 1o de agosto, Ricardo Rodríguez tiene una nueva responsabilidad: es el Country Chair de Shell para la Argentina, Chile y Uruguay. Al poco tiempo de aterrizar, y en su primera entrevista con un medio local, Rodríguez parece conocer el negocio como si llevara años en el país. Es que tiene más de 20 años de experiencia en Shell, donde ocupó posiciones en diferentes proyectos de upstream onshore y offshore. También lideró la ingeniería petrolera y planificación de desarrollo para el portfolio Shell Deepwater en América. Y en su última responsabilidad antes de la actual, desempeñó tareas en la cuenca de no convencionales de Permian, en Estados Unidos, responsable de cambiar el mapa energético del mundo y un buen roadmap de qué se podría hacer en Vaca Muerta.
El ejecutivo venezolano, que estudió Ingeniería Química en la Universidad Central de Venezuela y tiene un Máster en Ingeniería Química por la University of Southern California, supervisará una operación que, asegura, es estratégica para Shell, con una fuerte presencia en Vaca Muerta. “Vengo directamente de trabajar en el Permian. Mi última posición fue como gerente general, a cargo del desarrollo del activo. Tenemos un gran nivel de actividades, de 5 a