A caba de terminar el segundo año en el que nos hemos visto afectados por el maldito virus, que sigue mutando, extendiéndose y afectando a todos los sectores de la economía. La relojería, al igual que el resto, se ha visto impactada de nuevo por la COVID, pero ese no es el único de sus problemas, lo que ha hecho que esta tormenta perfecta no termine de amainar.
Según la información publicada por la Federación de la Industria Relojera Suiza (FH), las exportaciones de relojes helvéticos