EL SUEÑO DE ALEJANDRO MAGNO AUGE Y OCASO DE ALEJANDRÍA – LA DESTRUCCIÓN DE SU BIBLIOTECA –
AÑO 331 A.C. SOBRE LA INHÓSPITA EXTENSIÓN QUE RODEA RACOTIS, UNA PEQUEÑA ALDEA PORTUARIA SITUADA EN EL NOROESTE DE EGIPTO, LA COMITIVA DE ALEJANDRO MAGNO (356-323 A.C.) ESPARCE TRAZOS DE HARINA DELIMITANDO EL PERÍMETRO PARA LA CONSTRUCCIÓN DE UNA NUEVA CIUDAD. Descendió entonces una inmensa nube de aves de todas las clases que, tras picotear los granos con voracidad, alzó nuevamente el vuelo. El general macedonio quiso entonces consultar el significado que podía presagiar aquello. Los augures vaticinaron: “La capital que has mandado construir alimentará a todo el mundo civilizado. Porque igual que las aves recorren el mundo entero, desde todos los rincones habrá hombres que vayan y vengan de ella”. Aquella ciudad recibiría el nombre de Alexandria ad Aegyptum (al margen de Egipto).
¿LA ATENAS DE EGIPTO?
En su visita al oráculo de Siwa, en el desierto líbico, había escuchado del gran dios Amón-Zeus la siguiente revelación: “Será privilegio de esta ciudad, urbe de magníficos templos, superar con su población a las mayores multitudes… Yo seré su protector para que las calamidades no perduren
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos