Mamadou
n la puerta del supermercado está pidiendo cada día Mamadou, un inmigrante africano sin papeles. Hace más de diez años que lo conozco. Me llamaba la atención su jovial sonrisa cada vez que pasaba a su lado. Empecé a comprarle alguna cosa que necesitara para comer cuando mi mujer o yo íbamos al súper. Con el tiempo fuimos conociéndolo y nos interesamos por su situación familiar, legal, etc. Llevaba muchos años en España pero sus papeles no estaban en regla y por tanto no podía trabajar con un contrato. Me
