Las MUJERES COMO evolución
UNA PASARELA QUE CELEBRA LA DIVERSIDAD
MARIE CLAIRE: ¿CUÁL ES TU VISIÓN IDEAL DE LA BELLEZA? KHRYSTYANA: Mi ideal es ver al mundo reconocer cuán hermoso es. Creo que el mundo sería un lugar mejor si todos –y cada uno de nosotros– nos entregamos generosamente amor verdadero. No el amor de fantasía de Hollywood, sino el verdadero amor de aceptación. De esta manera también podemos aceptar la belleza en todos los demás. MC: ¿QUÉ DEBEMOS CONOCER SOBRE LA LABOR QUE HACES? K: Escuchar a personas increíbles a través de mis proyectos nos ayudará a romper los estándares de belleza obligatorios. Es como si cada flor en la tierra quisiera ser una rosa y toda su vida girara alrededor de eso. Mi flor favorita es la margarita, por ejemplo, y me duele pensar que una margarita odiara su forma de sol, sus pétalos y su tallo... Entonces, ¿por qué las mujeres se esfuerzan tanto por no ser ellas mismas? ¿Dónde está la alegría en eso? MC: ¿QUÉ LEGADO ESPERAS DEJAR? K: Me encantaría que de mi se diga: “Fue simplemente humana”. Con eso quiero decir que cometer errores, aprender de ellos, estar vivo, ser estúpido, estar feliz o triste... todo eso, es ser hermosamente humano.
KHRYSTYANA @KHRYSTYANA
MODELO Y FUNDADORA DE THE REAL RUNWAY, DESFILE INCLUSIVO DE TALLAS, GÉNEROS, RAZAS Y CAPACIDADES.
ACABANDO CON LA ‘FATPHOBIA’
Para mí, el amor propio empieza con el respeto. Enamorarnos de nuestros cuerpos toma tiempo, ya que vivimos rodeadas con ideales de belleza tan homogéneos y tóxicos que fueron creados por ciertas industrias –que necesitan que odiemos nuestros cuerpos y caras– para comprar sus productos. Me gusta mucho experimentar con la ropa y el maquillaje. Aunque históricamente estas industrias han creado ideales de belleza falsos, podemos reclamarlas para sentirnos poderosas. Cuando me pongo un vestido apretado, una minifalda, un pantalón arcoíris o algo que brilla, reclamo el espacio que ocupo sin disculpas oA la María de 15 años le diría que deje la espera. Ella era una chica quien pensaba que no podía amar, viajar, reírse, comer, beber, vivir... hasta perder peso. La verdad es que no tenemos que aguardar tener un cuerpo perfecto para vivir como queremos. Sólo hay que comprometerse a comenzar. “Mi querida Marie, cuídate. Deja de pensar en los demás, deja de aceptar a quienes no lo hacen para ti, deja el dolor, porque no te traerá la felicidad que buscas. Las tallas pequeñas tampoco. Ni las revistas que lees en el salón de belleza. Todos las herramientas que necesitas para la felicidad ya las tienes dentro de ti”.
