Iván Ilich intentó hablar con su cuñado sobre su estado físico, pero este guardó silencio. En ese momento, Praskovya Fyodorovna llegó y su cuñado salió a recibirla. Iván Ilich cerró la puerta con llave y se contempló en el espejo detenidamente, primero de frente y luego de perfil. Luego, tomó un retrato en el que aparecía junto a su esposa y lo comparó con la imagen reflejada en el espejo. La diferencia era notable.En un intento desesperado por obtener respuestas, Iván consultó a un médico, quien sugirió que su problema podría estar relacionado con el riñón o el intestino. Sin embargo, a medida que pasaba el tiempo y ningún medicamento prescrito por los médicos parecía tener un efecto positivo en su salud, Iván decidió dejar de tomar medicamentos por completo.Su condición empeoraba gradualmente, y su dolor se intensificaba con el tiempo. Su familia se preocupaba al ver que no mejoraba, y parecía que Iván también había perdido la voluntad de curarse.Puedes encontrar el audiolibro completo de esta obra en nuestro canal de Youtube en La muerte de Iván Ilich De León Tolstói