La falta de empatía y de tolerancia es un mal que crece exponencialmente. Llevamos dos años padeciendo la presencia de un virus que cambia y que nos ha coartado la vida, la salud y nuestra manera de coexistir. Sin embargo; no entendemos. Seguimos haciendo bromas cotidianas como si esto no fuera algo trágico para miles de familias alrededor del mundo. No entendemos que el mundo no se va a acabar mañana si no andamos en cumpleaños o en el súper como si nada; pero si se va a acabar si dejemos de cuidarnos entre todos… 
No entendemos que los privilegios nos nublan el juicio: que no todos tenemos la oportunidad de vacunarnos nosotros, o a nuestros hijos en el extranjero. 
No entendemos que tenemos que unirnos como sociedad civil, para lograr que los medicamentos sean abastecidos, que las pruebas estén disponibles y que los niños sean vacunados… 
#VacunenALosNiños 
Piénsalo.