A veces me digo a mi mismo que no me arrepiento de nada de lo que he hecho respecto a mi trabajo pero no es verdad. Y no pasa nada. Si que me arrepiento de cosas. Pero lo interesante es que he descubierto que una forma para descubrir en qué puedes mejorar en tu trabajo es hacer ese ejercicio de localizar de qué te arrepientes.
Al final, saber detectar aquello que no te ha gustado, has hecho mal o no te ha hecho sentir bien es una manera muy fácil de no volver a hacerlo.
Así que si quieres mejorar en tu trabajo, pensar en qué te arrepientes es una manera fácil de decir qué no quieres volver a repetir en tu futuro profesional.