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213 | Me siento mal porque mi esposa gana más dinero que yo.

213 | Me siento mal porque mi esposa gana más dinero que yo.

DeReflexiones cristianas con José Ordóñez


213 | Me siento mal porque mi esposa gana más dinero que yo.

DeReflexiones cristianas con José Ordóñez

valoraciones:
Longitud:
10 minutos
Publicado:
13 mar 2023
Formato:
Episodio de podcast

Descripción

Los hombres generalmente tienen muchas luchas mentales, asuntos a los que les cuesta acomodarse, dentro de ellos está este, es un constante cuestionarse por el hecho de que su esposa devengue más salario y aporte más economía al hogar.El complejo del macho productor.Venimos de una crianza en donde al mismo padre de familia le escuchábamos frases como: “El día que usted dé de comer en esta casa manda”. Entonces asociamos el gobierno, la autoridad y el valor de un cónyuge a la capacidad de producir dividendos, y esto es falso.Todos los miembros de una familia son iguales, independientemente del rol que desempeñen o de su aporte económico.Es que, si doy menos dinero siento que tengo menos autoridad para gobernar.Además es una trampa mental que la sociedad ha querido enquistar en la mente de los hombres. Para atacar este complejo masculino habremos de decirlo claramente: “El hombre gobierna su hogar independientemente de la cuantía en su aporte económico”. Es raro decirlo, pero es así. La Palabra de Dios no estipula que el hombre deja de gobernar su casa por sus posibles fallas o debilidades, simplemente debe gobernarla, y hacerlo bien.Si le diéramos un valor desmedido a la capacidad de aportar más dinero a la casa se crearía una constante y fatigante lucha por conseguir más dinero que terminaría en: menos tiempo de calidad para la familia, aumento en las discusiones económicas y una final desorientación al rumbo que debe tener el núcleo familiar, pues mientras la mujer gane más se toma la dirección que ella propone, pero el día en que el hombre gane más, ése rumbo se vería inmediatamente modificado.Hay talentos, habilidades o proyectos que demandan tiempo para ser productivos.En ocasiones ella gana más porque él aún no ha terminado su preparación académica, en ocasiones él tiene un talento especial que necesita madurarse en una oportunidad que se está buscando. Este fue mi caso, Yasmith y mi suegra me ayudaron en el comienzo de mi matrimonio porque no era fácil encontrar trabajo como comediante. Una vez obtuve una oportunidad adecuada pude tomar las riendas económicas de mi familia, pero hubo un tiempo en que fui muy improductivo, fue entonces cuando Yasmith asumió en algunas oportunidades un momentáneo rol de proveedora. Reconozco que eso me hacía sentir incómodo, esa incomodidad era lógica y buena. Pero la incomodidad no hizo que yo me sintiera menos.¿Tú esposa gana más que tú? Dios te está enseñando humildad.Bueno, Dios está queriendo que los dos aprendan a ser humildes. La mujer no debe sentirse superior por aportar mayor economía a la casa, ni el hombre debe sentirse inferior por ello.Nunca humilles a tu cónyuge solo porque ganas más dinero.Acuérdate de la justicia de Dios que dice:Gálatas 6: 77 No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra.En los muchos años que dura un matrimonio puede darse el caso de que esa situación se torne inversa: quien ganaba más ahora gana menos. Créeme he conocido casos en donde el hombre, cuando tenía un buen trabajo, un buen salario humillaba a su esposa, de pronto sufrió un descalabro económico, o una enfermedad, o un accidente, y fue entonces cuando tuvo que bajar la cabeza arrepentido y en muchas ocasiones su esposa terminó cobrándole con la misma moneda todo su mal proceder.Hoy produces, quizá mañana no. Ten la humildad de proveer sin sentir que esto te da un valor desmedido que verdaderamente no tienes.¿Devengas poco por tu pereza?Descartemos que no estás en esta situación por tu pecado.O sea, ganas menos, porque trabajas menos. Te da pereza salir a buscar trabajo, tu esposa no para de darte extensos sermones por tu falta de interés en salir a intentar mejorar tu situación económica, pues si es así debes ponerte sobre la brecha y decididamente asumir tus responsabilidades como Dios las ordena. Mira este versículo:1a Timoteo 5:88 El que no provee para los suyos, y sobre todo para los de su propia casa, ha negado la fe y es peor que un incrédulo.Recuerda que, a las m
Publicado:
13 mar 2023
Formato:
Episodio de podcast

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