¿Qué tienen en común marcas como Coca-Cola, Nestlé o Maseca? ¿Te sorprendería saber que, a pesar de que una vez que has tomado la decisión de dejar de consumir los cuerpos explotados de animales no humanxs y de que haces lo posible por no comprar productos no veganos, sigues apoyando a sus explotadores? Probablemente a todxs nos ha pasado y no lo sabíamos.
El problema es que estas marcas, entre otras, están ligadas al monopolio de Cargill, multinacional cuyas prácticas incluyen la esclavitud y el especismo con total impunidad. Así, empresas como esta contribuyen a la creación de una cultura y realidades violentas.
Te invitamos a escucharnos con nuestras brigadistas Sam y Diana, quienes nos platicarán un poquito sobre las prácticas especistas de los monopolios y por qué son dañinas para todxs los animales, humanxs incluidxs, y para el funcionamiento de la sociedad.
¡Recuerda que tu acción es importante. Únete y sé unx brigadista por la liberación animal!
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