14 de febrero | Nueva YorkHola, maricoper. Propagación de protestas.Leer esta newsletter te llevará 9 minutos y 18 segundos.¿Pero te dolió o no? Bienvenido a La Wikly.Lo importante: las protestas de camioneros en Canadá contra los mandatos de las vacunas se extendieron a lo largo del fin de semana en varios puntos del país, agravando una crisis que Joe Biden mira con preocupación desde la Casa Blanca por su posible efecto contagio.Contexto: hace casi un mes, multitud de camioneros canadienses ocuparon las calles de la capital, Ottawa, con tal de enviar un mensaje de rechazo a las políticas pandémicas recientes del primer ministro Justin Trudeau. Lo que empezó como una pequeña manifestación es ahora un movimiento que se ha generalizado por todo el país.Lo más grave se ha dado en la frontera entre Canadá y Estados Unidos, donde ciudadanos sin conexión con la industria del transporte empezaron esta semana pasada a bloquear puntos de acceso y a desestabilizar la cadena de suministro que conecta a ambas economías.Explícamelo: las protestas han recibido el apoyo de líderes conservadores en ambos lados de la frontera, incluido Donald Trump, y las reacciones en redes sociales estos días auguran que ya hay miles de estadounidenses tanteando asistir a manifestaciones similares en EE. UU.En esta newsletter, exploramos el origen de las protestas, la mecha que las ha agravado y el posible efecto contagio que podría sumar una nueva crisis a la lista de Biden.? Un mandato polémicoCómo: la oleada de protestas se originó con el “Convoy de la Libertad”, un grupo de camioneros autoconvocados que comenzaron a manifestarse contra un mandato de vacunación que obliga a todos los camioneros canadienses que cruzan la frontera entre EE. UU. y Canadá a estar completamente vacunados —o a enfrentar una cuarentena en sus hogares durante dos semanas a su regreso.En su viaje a través del país para manifestarse en Ottawa, la capital canadiense, el convoy fue cosechando apoyos de diversos grupos que rechazan las restricciones sanitarias de prevención contra el Covid-19.Así, cientos de camioneros se sumaron a miles de otros manifestantes, en automóvil y a pie, que exigían cambios en la gestión gubernamental de la pandemia.A los reclamos se sumaron sectores de la extrema derecha nacional, con algunos manifestantes ondeando banderas confederadas y nazis; gesto que fue condenado por las autoridades:Con el paso de los días, se intensificaron las protestas y las demandas, que ahora no solo incluyen las restricciones fronterizas sino también aquellas que restringen la actividad de negocios, incluyendo restaurantes o gimnasios, limitan la capacidad en grandes eventos y exigen el uso de mascarillas.Canadá cuenta con algunas de las medidas de Covid-19 más estrictas del mundo, con mandatos generalizados de uso de mascarilla y limitaciones en el tamaño de las reuniones, no solo en grandes eventos sino también en casas particulares.Los manifestantes permanecerán en Ottawa "durante el tiempo que sea necesario para que los gobiernos de Canadá pongan fin a todos los mandatos" asociados con el covid-19, dijeron los organizadores del Freedom Convoy en un comunicado.El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, dijo que su gobierno no esperaba que el mandato de las vacunas afectara de forma tan significativa considerando que alrededor del 80 por ciento de los camioneros en Canadá tienen la pauta de vacunación completa.El núcleo de camioneros protestantes es, en palabras de Trudeau, una “pequeña minoría marginal”. Minoría que también incluye a los protestantes no-camioneros, ya que varias encuestas muestran que las políticas de contención de la pandemia tienen un alto nivel de aceptación en la población.? Bloqueos problemáticosLos manifestantes, que han incluido hasta 8,000 personas en Ottawa en su punto máximo, aterrorizaron a la población de la capital: bloquearon calles, forzaron el cierre de negocios y tocaron sus bocinas a horas intempestivas.El alcalde de Ottawa, Jim Watso