Toyota es una de las pocas empresas que en los últimos años han conseguido un éxito sin precedentes a escala mundial, que muchas otras han tratado de imitar sin resultado alguno. Esto se debe a que la compañía japonesa basa su éxito en su innovador enfoque de gestión, algo que nadie ha sido capaz de reproducir en su propia organización. Toyota trata de inculcar internamente una serie de rutinas o ‘katas’ que tienen como objetivo que los trabajadores y los directivos trabajen día a día en la realización de mejoras continuas de los procesos. De esta forma, Toyota consigue adaptarse al entorno, a las circunstancias que ocurren tanto dentro como fuera de la empresa.