Todos somos como velas, sin saber que algo nos puede encender, hasta que estamos cerca de una chispa, que se pose en nuestro ser y nos hace brillar.
¡La luz que en nosotros se enciende, nos ayuda a ver más allá, de lo que los ojos nos pueden mostrar! 
Es como encender las luces de un automóvil, en una carretera en plena oscuridad. El camino solo a unos metros delante de nosotros se podrá notar, pero a medida que avanzamos, “El camino nos guiará”
La iluminación es un anhelo que todos los seres deseamos algún día alcanzar, pero lo olvidamos al llegar…
Cuando la luz de tu ser es irradiada con amor, no solo te guiará, también serás un faro para muchos que están en completa obscuridad.
¡De a poco todos los seres despertarán!

Mi alma saluda a tu alma...