Nuestra conversación interna, aunque no sea escuchada por otros, es más productiva para condiciones futuras, que todas las promesas y amenazas audibles de los hombres. 
Tu ideal está esperando ser encarnado, pero a menos que tú mismo le ofrezcas filiación humana, es incapaz de nacer.
¡Debes definir la persona que deseas ser y luego, asumir el sentimiento de tu deseo cumplido con fe, en que esa suposición encontrará una expresión a través de ti! 
¡El gran secreto del éxito, es una conversación interior controlada desde premisas del deseo cumplido!
El único precio que pagas por el éxito, es abandonar tu antigua conversación que pertenece al hombre viejo, al hombre sin éxito.

Mi alma saluda a tu alma...