En el capítulo de hoy nos toca hablar acerca de cómo y por qué enganchan los videojuegos. Veremos que se trata de una razón química por un lado, y psicológica por otro, desembocando en una combinación de factores para desencadenar la generación de Dopamina, un neurotransmisor que se encarga de acentuar las emociones en nuestro cerebro. Luces, colores, sonidos, formas, historias, personajes y mecánicas son diseñadas para poder generar dosis diferentes del neurotransmisor en diferentes formas y momentos, y que así la experiencia se convierta en algo tan placentero como comer chocolate, hablar con esa persona especial, o ver esa película que te desata emociones únicas.
Pero ojo, el exceso (como todo en la vida) no es bueno, y por eso los Game Designers deben aprender a balancear su cantidad, en base a la habilidad del jugador, y los retos que plantea el juego, así que no será tarea fácil, de hecho que sea una rama de los videojuegos que ha evolucionado mucho en los últimos años, desde el lanzamiento de los videojuegos F2P!
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