Las begonias

Por Daniela Beretta

Una guía para orientarse en el apasionante mundo de las begonias; con toda la información necesaria para escoger entre las diferentes variedades de flores (de follaje decorativo o de porte arbustivo) adaptadas o no a la vida en el exterior. Un libro magníficamente ilustrado, con dibujos y explicaciones sobre el cultivo de las begonias: plantación, exposición, riego, poda, fertilización…. Además, la obra contiene prácticos consejos, sugerencias para afrontar el invierno y preparar la reproducción, para prevenir y, eventualmente, curar las enfermedades más comunes y evitar el ataque de los parásitos.

• Idioma: Español
• Editorial: Parkstone International
• Fecha de lanzamiento: 10 ago 2017
• ISBN: 9781683254294

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problemas

(Fotografías de Lasagni)

INTRODUCCIÓN

Las plantas pertenecientes a la familia de las begonias son muy diferentes entre sí, con características muy particulares en cuanto a color, floración, tamaño de hojas y flores y porte. Algunas begonias se cultivan por el follaje, como la Begonia semperflorens, también denominada «begonia de macizo», y se utilizan sobre todo para arriates y borduras gracias a la riqueza de sus flores. Otras, como la B. x hiemalis (B. elatior) y las begonias tuberosas, se escogen por sus magníficas flores dobles, parecidas a las rosas, las peonías o las camelias.

Los diferentes tipos de begonia se distinguen por el uso que se hace de ellas: se utilizan plantas con flores en macetas para decorar interiores, o en jardineras para adornar galerías y terrazas, o también para plantarlas directamente en plena tierra, en el jardín.

Las begonias arbustivas también son muy apreciadas.

Por lo tanto, siempre es posible encontrar la variedad de begonias más adecuada a nuestras necesidades: para el interior, el jardín o la terraza.

■ 1690: la denominación del género Begonia proviene del nombre del intendente de Santo Domingo, el francés Michel Begon. Su compañero de viaje Charles Plumier, el franciscano responsable de la introducción de la begonia y la fucsia en Europa, fue quien se lo dedicó.

■ 1695: primera descripción de una begonia tuberosa.

■ 1753: el célebre naturalista Linneo estudia las especies de begonias conocidas en esa época.

■ 1788: Sir Joseph Banks lleva a Londres la Begonia minor de Jamaica.

■ Principios del s. XIX: llega a Europa un ejemplar de la Begonia semperflorens de flores blancas, una especie espontánea en Brasil, con porte de mata.

Posteriormente, Victor Lemoine, de Nancy, introduce en Francia los primeros híbridos rojos de flores grandes.

Las primeras begonias presentes en los jardines botánicos y privados son de tipo arbustivo y rizomatoso. Sólo después se desarrollaron las begonias de follaje ornamental y las tuberosas. Las principales especies de begonias, usadas para la creación de nuevos híbridos, empezaron a descubrirse a partir de 1850.

(Fotografías de Lasagni)

Begonia x tuberhybrida.

■ 1858: la Begonia rex es importada a Europa por una empresa belga. Las interesantes características de su follaje llevaron a los especialistas en begonias a cruzarla con otras especies, entre ellas la B. imperialis y la B. grandis. La aportación de una de estas especies, la B. diadema, se encuentra en los híbridos de B. rex que se cultivan y se comercializan actualmente: sus hojas, estrechas y profundamente divididas o lobuladas, son distintas de las de la B. rex clásica, que son redondeadas y de borde liso.

■ 1860: las experiencias de hibridación realizadas entre seis especies diferentes dan origen al grupo de las Begonia x tuberhybrida. El color rojo intenso proviene de la B. boliviensis; las tonalidades de amarillo, de la B. pearcei; y las flores grandes y dobles, de la B. veitchii. Los cruces dan flores simples o dobles con franjas, pétalos filiformes, finos, blancos, amarillos, naranjas, rosas o rojos.

■ 1883: aparición de la primera Begonia elatior en Gran Bretaña, a partir del cruce entre la B. socotrana y varias especies de begonias tuberosas. Después surgieron en América y Europa nuevas variedades, entre ellas la «Rieger», más fácil de multiplicar y con mejor floración.

■ 1891: nacimiento de la begonia «Gloire de Lorraine», procedente de un cruce entre la B. socotrana y la B. dregei, obtenida por el botánico francés Lemoine.

■ 1930: Benary obtiene en Alemania la variedad «Bertiniis», una begonia tuberosa compacta de flores simples, adecuada para la exposición a pleno sol.

■ 1940: Maurice Mason descubre en Malasia la Begonia masoniana.

■ 1990: Benary obtiene las primeras Begonia elatior por medio de siembra: «Charisma coral» y «Charisma orange».