El 8 de septiembre de 2022, pasadas las 15:00 horas, fallecía en el castillo de Balmoral (Escocia) la reina de Inglaterra,, (1926-2022) a los noventa y seis años de edad. Su reinado de 70 años y 214 días, había sido el más longevo de la historia de Reino Unido, y el segundo en la historia de las monarquías, después de Luis XIV de Francia (1638-1715), más conocido como el Rey Sol, que se habría mantenido en el trono, desde niño, durante 72 años y 110 días.
La noticia, que fue comunicada oficialmente tres horas después, se convertía en la más leída en la red de redes. Y, dentro del caudal de titulares que pretendían encontrar el vaticinio de su muerte en crípticas profecías, se viralizaba una singular noticia: un usuario anónimo de la red Twitter, cuya identidad no ha trascendido, y que firma con el nick @Logan_Smith526 (por lo que se le conoce como Logan Smith), había escrito semanas antes una funesta profecía: “La reina morirá el 8 de septiembre de 2022…”.
¿VATICINIO O FAKE NEW?
En este caso, la “profecía” de Logan Smith no era el típico fake que circula en internet cuando la magnitud de una noticia satura las redes internáuticas y que ha sido añadido “a posteriori”. La “predicción” había sido publicada en twitter el 7