i hablamos de las décadas de los 50 y 60 en el cine europeo, lo de los actores y actrices italianos era una cosa de locos, tanto en lo interpretativo como en lo Cómo han cambiado las cosas, ¿verdad? Para ese reportaje, la revista ‘utilizó’ a tres importantes artistas europeos (Marcello Mastroianni, Françoise Sagan y Kenneth Tynan) para que sirvieran de insospechados guías turísticos de sus propios países a Barbra Streisand, Edward Albee y Sol Hurok. Fue Mastroianni el que puso rostro (y titular) a la portada de este número, en abril de 1965, dándole la bienvenida a Italia a Streisand. En el interior, un texto del propio actor a modo de carta abierta presentaba las reflexiones, dudas e inquietudes que le aparecían ante la ‘visita’ de la actriz. “Creo que sería el peor anfitrión posible para ella”, dejaba escrito. “Debería estar rodeada de todo tipo de gente inteligente, alojarse en el Rome Excelsior e ir a fiestas. A mí no me gusta mucho salir por ahí”. Tras esas primeras dudas, recomendaba a la actriz “mi restaurante favorito de Roma, Dal Bolognese, justo al lado del Caffè Rosati, donde suelo quedar con mis amigos”. Eso en Roma (“imagino que querrá ver el Coliseo”), pero también habla de llevarla al norte, “Milán, quizá Florencia [...] aunque yo amo el sur. Sin duda la llevaría a Nápoles, a comer pasta y en Ciro’s Margellina y caminar por las calles de Santa Lucía”.
