uerida Kim Basinger: cómo me alegro de verte de nuevo por aquí. Estaba tan huérfana sin tu presencia que, cuando aparecistede tu hija –por cierto, enhorabuena, abuela, y felicidades por tus próximos 70–, me entró un ataque de nostalgia que me ha durado nueve semanas y media. Entiendo que te hayas molestado, porque celebrar una fiesta infantil en unno es la mejor idea, pero tampoco me lo esperaba de ti,sin rival de los 80. Un consejo: nunca digas nunca jamás, que si llega un segundo nieto podría ser peor. Por cierto, menuda figura conservas. Estás igualita que en. ¡Cuánto envidié a Richard Gere! De cara no puedo decir lo mismo, lo siento... ¿qué te has hecho? ¿Tengo que dar la razón a Dan Aykroyd cuando decía: “Mi novia es una extraterrestre”? En fin, se me acaba el tiempo. Pero he oído por ahí que “ella siempre dice sí” –hablaban de ti, creo–, así que uno de estos días me armo de valor, me paso por tu soleado L.A. –pero el – y te pido una cita a ciegas. Tranquila, me reconocerás enseguida: iré de Batman. ¿Y me firmarías esta foto?
