El castillo de Riba de Santiuste (Sigüenza, Guadalajara) –construcción árabe erigida en el siglo IX– estuvo derruido, abandonado a su suerte hasta que, en 1973 fue definitivamente subastado por el Estado, terminando en manos de un particular, Enrique Calle Dono so. Fue este quien tuvo la idea de arrendar la fortaleza a Nueva Acrópolis (MÁS ALLÁ, 364), una “asociación cultural” que algunos han calificado de ocultar un trasfondo inspirado en el esoterismo de madame Blavatsky (MÁS ALLÁ, 379), fusionado con una estética que algunos periodistas han calificado de “filonazi”. A cambio, y durante varios años, el castillo sería reconstruido por sus adeptos, convirtiéndose en lugar de celebración para sus ceremonias.
Nueva Acrópolis, cuya doctrina es una fusión de elementos esotéricos, orientalistas y de conceptos extraídos de la filosofía de Platón (MÁS ALLÁ, 405), fue fundada en Argentina en 1957 por Jorge Ángel Livraga (1930-1991), más conocido como JAL y su esposa Ada Albrecht, está presente en unos cuarenta países y cuenta con más de diez mil seguidores. En 1972, sería la discípula de JAL, Delia Steinberg quien exportaría la asociación hasta España, donde convocaría conferencias y cursos sobre temas relacionados con el misterio y lo esotérico, que eran su reclamo de “captación”.
El cuidado y mantenimiento del castillo sería encomendado a , excéntrico personaje –tenía como mascota a una leona–, vinculado con la legión, y que habría trabajado como periodista de TVE. Nombrado Guardián del Castillo, Chao, que tenía licencia de