El testimonio de una psicóloga
«Yo de joven no podía estar más de una hora en una discoteca. Pasado este rato me tenía que ir, porque me saturaban todos aquellos estímulos». Lo explica la psicóloga Anna Romeu, que está especializada en el tema de la alta sensibilidad y acaba de publicar «Soc sensible» (Rosa dels Vents), sobre las personas con alta sensibilidad, también llamadas PAS.
En el libro aporta toda su experiencia clínica con decenas de pacientes después de años de carrera, pero además suma su experiencia personal como PAS, un rasgo de la personalidad «que afecta a entre un 20% y un 30% de la población».
En la práctica, una persona altamente sensible tiene una sensibilidad emocional y sensorial más alta que la mayoría, puesto que su sistema nervioso procesa la información de una manera más profunda e intensa que las personas que no tienen este rasgo. Son personas que reflexionan mucho sobre todo lo que les pasa y lo que perciben, que tienen una fuerte emocionalidad