aperitivo _ viajes
PARECE QUE ESTAMOS FRENTE A UN CUADRO HIPERREALISTA, pero el movimiento y el rugido del mar recuerdan que no es así, que lo que se ve es nada más que la realidad. Una paradísiaca. La duda surge a causa del marco negro que rodea el paisaje, idea de los arquitectos del despacho JSa Arquitectura –comandado por Javier Sánchez y Benedikt Fahlbusch–, quienes encontraron, entre techo y suelo, el efecto perfecto. Al llegar al The Cape, gracias a la estructura del lobby, lo primero que se ve es un cuadro maravilloso y viviente que simula el portal hacia una dimensión relajada y placentera.
El efecto se repite, que el hotel tiene diseñadas para ambientar cada uno de sus espacios. Un perfecto entre el lujo contemporáneo que tanto aprecia el arte, la personalización y el ingenio con la naturaleza desbordante y contrastante de la Baja que tan fácil nos lleva del océano al desierto y de lo urbano a lo indómito.