Si el arte, tal y como se conocía hasta finales el siglo XIX, mutó con la invención de la cámara fotográfica, Nicola Bertellotti (1976, Pietrasanta) se ha propuesto recuperarlo a través de ella. Con una investigación estética centrada en la decadencia, el fotógrafo italiano lleva más de una década buscando lugares que aún conserven una sensibilidad tan romántica como la suya.
La primera vez que se aproximó a ella tenía ocho años. En una excursión con su padre a un oxidado parque de atracciones, comenzó un viaje sensorial en el que encontraría su propio camino vital. Y de forma, reconoce, “totalmente autodidacta: lo que sé lo aprendí equivocándome y volviendo a equivocarme”. Como no