, el catalán Joan Melé tenía 56 años y otros 30 de trayectoria en la banca tradicional cuando consideró prejubilarse. El sueño de “vivir sin trabajar” podía hacerse realidad… Sin embargo, en los últimos tiempos, Melé se había sentido incómodo en su comodidad. Había empezado en los 90, cuando unos “supuestos expertos formados en prestigiosas universidades internacionales” habían tomado el management de la caja de ahorros en la que trabajaba “con el único objetivo de hacer mucho dinero, y hacerlo rápido”. Esto significaba venderles a sus clientes cosas que no necesitaban y que ni él mismo sabía bien qué eran. “Dejamos de hacer el trabajo de un banco y
“GANAR DINERO NO PUEDE SER UN PROPÓSITO DE VIDA, SOLO UN RESULTADO”
Feb 24, 2023
4 minutos
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos