RESERVA GAME
Reserva la Deluxe Edition de Final Fantasy XVI, exclusiva de GAME y cargadita de contenido extra. ¡Y no te pierdas el póster y el set de cartas de regalo!
*Promoción limitada a 2.000 unidades.
■ PS5 ■ CREATIVE BUSINESS UNIT III (SQUARE ENIX) ■ ROL ■ 22 DE JUNIO
Square Enix se encuentra en un momento extraño, pues es inusual que una de las mejores editoras de videojuegos de la historia tenga la necesidad de reivindicarse, pero, al final, a todo hijo de vecino le acaba pasando, se llame Sony, Microsoft, Nintendo, Sega, Konami o de cualquier otro modo. En realidad, a la compañía japonesa le ha sucedido muchas veces a lo largo de la historia, como le pasó con proyectos como Final Fantasy XIV o Final Fantasy Versus XIII, que supo encauzar a tiempo. En 2023, el problema ha sido el tropiezo de Forspoken, que ha llevado al cierre de Luminous Productions y a la redistribución de su personal en otros equipos de la empresa. Y eso sin olvidar el abandono reciente del battle royale Final Fantasy VII: The First Soldier o los experimentos con gaseosa de NFT. Sin embargo, ese mal momento puede ser historia a partir del 22 de junio, cuando se lanzará Final Fantasy XVI, que pondrá el broche de oro a uno de los mejores semestres que recordamos.
Siguiendo la línea que ya marcó Final Fantasy VII Remake en 2020, la nueva entrega numerada de la saga supondrá una vuelta parcial al pasado, en el sentido de que se volverá a la exclusividad con Sony que tan buenos réditos dio de 1997 a 2007, cuando llegaron a PSOne y PS2 la séptima, la octava, la novena, la décima, la undécima y la duodécima parte. Nada que ver con las Ligas de Campeones del Real Madrid, por cierto. Así, si la decimotercera y la decimoquinta apostaron también por Xbox y PC, la decimosexta volverá a ser para una PlayStation de sobremesa: la quinta.
Ese salto generacional implicará el final de una transición que Square Enix no se había atrevido a acabar de consolidar. Hablamos del paso a y tenían ya mucho de RPG de acción y permitían desplazar a los personajes con libertad por el campo de batalla, pero sus combates seguían atados por ciertos hilos de los turnos de toda la vida, igual que pasaba con , que, no obstante, marcó el camino que se debía seguir.