Pertenece a los cítricos y tiene fama de ser ácido, pero una vez consumido y dentro del organismo, ejerce una función totalmente contraria a la ácida, ya que en el metabolismo interno pasa a ser material alcalinizante, contrarrestando los poderosos ácidos internos, ya que es considerado un ácido natural (no elaborado por el cuerpo).
Naturaleza y sabor: fresco y agrio.
En 100 g. de jugo de limón tenemos: