“Yal llegar Jesús a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos: ‘¿Quién dicen los hombres que es el hijo del hombre?’ Y ellos respondieron: ‘Unos, que Juan el Bautista; y otros que Elías o Jeremías o alguno de los profetas’. Él les dijo: ‘Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?’. Respondió Simón Pedro y dijo: ‘Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente’. Entonces, Jesús le respondió: ‘Bienaventurado eres, Simón hijo de Juan, porque eso no te lo ha revelado la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Mas yo también te digo que tú eres Pedro, y sobre esta a roca edificaré mi Iglesia…”.
Este pasaje del Evangelio atribuido a Mateo (16, 13-18) es la piedra angular sobre la que se cimenta la creación de la Iglesia católica. Sin embargo, frente a la lectura teológica que presenta a Jesús de Nazaret como el Cristo Mesías que fundó esta institución, los historiadores más críticos mantienen una visión distinta: el Nazareno no tuvo ninguna intención de fundar una institución religiosa y, si acaso, fue la propia Iglesia la que inventó el mito de un personaje identificado como Cristo…
CRISTO Y JESÚS: DOS PERSONAJES CONTRAPUESTOS?
Siendo uno de los personajes menos conocidos –hay quienes niegan su existencia–, resulta paradójica la influencia que la figura de Jesús de Nazaret ha ejercido en los últimos dos mil años de Historia de la humanidad hasta nuestro presente. Incluso las personas que se