Escríbenos a marieclaire@zinetmedia.es
tiempo que no me compraba una revista en papel, pero, este mes, al pasar por delante del quiosco, la portada de Marie Claire captó enseguida mi atención. Para mi sorpresa, una vez abrí la primera página, tuve que leerme toda la revista de una sentada. Es el equilibrio perfecto entre lo socialmente trascendente y los placeres culpables.