l pasado septiembre, ella y su compañera Carolina Iglesias llenaron el Wizink Center de Madrid con un espectáculo que congregó a más de 12 000 personas. Por ello, es inevitable que la primera pregunta que le hagamos sea esa: Creo que las chicas que nos escuchan (son El humor de Carolina (Iglesias) y el mío es muy distinto, pero nos complementamos muy bien. Ella tiene un humor mucho más blanco, es mucho más tranquila; y yo soy lo contrario: una faltona, mucho más escatológica, más pesada… El humor tiene que partir de la libertad y de la crítica. Me han cancelado tantas veces que lo único que han conseguido es darme más alas. Las cosas que decimos impactan mucho y son muy comentadas, lo que te resta libertad. Yo he estado muy rayada y agobiada con ello, pero a raíz de que nos han cancelado cosas, he aprendido a relativizar los palos. Todos tienen algo de mí, sobre todo en la infancia, que es autobiográfica. Todas las protagonistas se comportan en la vida adulta de una determinada manera porque han vivido desde pequeñas con una culpa inoculada de base. Yo tengo muchísima culpa gracias al colegio ultrarreligioso al que fui. Tu sexualidad, la forma en la que debías relacionarte con la gente, cómo tenías que actuar si eras mujer, qué reglas debías seguir… Al final es un arma de sumisión poderosísima. Mientras nosotras estemos calladas y rezando el rosario, no vamos a estar haciendo lo que hacen ellos: conquistar el mundo. Hay muchísima desesperanza. Parece que lo tenemos todo si nos comparamos con nuestros abuelos u otras generaciones anteriores, pero somos tremendamente infelices. Es una realidad. La gente tiene cada vez más depresión y vivimos en un mundo acelerado que nos exige muchas cosas. Vivimos en precario pero nos apuntamos a y creemos que nos va muy bien. Ganamos mil euros al mes y no se puede vivir con eso en Madrid. Nos hemos metido en una vorágine entre la vida que queremos tener y la que tenemos en realidad.
"Vivimos en precario, pero creemos que nos va bien"
Dec 22, 2022
2 minutos
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos