iempre he soñado con ser actriz», afirma con convicción Georgina Amorós (Barcelona, 1998), quien achaca su pasión por la interpretación a su abuelo. «De niña no paraba de grabarme vídeos, era su musa», me cuenta entre risas. Con 5 años, la eligieron para hacer un anuncio y, lo que empezó como un juego para «la chica de la tele» (así la llamaban sus compañeros del cole), acabó convirtiéndose en su profesión. Tras pequeños papeles en producciones como s o la catapultó a la fama hace tres años. Finalizada su etapa en Las Encinas, a comienzos de año se estrena en la universidad con la serie (Netflix), donde interpreta a una joven estudiante de cine que vive una historia de amor con giros de guión inesperados. «Ha sido un rodaje muy intenso, pero precioso, porque Irene es uno de los personajes más especiales que he hecho nunca», revela. Mientras hablamos sobre esto, descubro que, tras su aparente imagen de fragilidad, se esconde una mujer fuerte con una madurez inusual para sus 24 años. «Haber empezado a trabajar tan pronto me ha hecho ser adulta mucho más rápido, además de muy perfeccionista», confiesa mientras revisa cada uno de los que ha preparado nuestra estilista.
«El éxito es querer y que te quieran mucho y bien»
Dec 22, 2022
7 minutos
Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.
Comienza tus 30 días gratuitos