La fuerte presión de la Iglesia Católica contra el polémico proyecto de resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que prohíbe la colocación de nacimientos navideños y otros “símbolos religiosos” en lugares públicos y espacios gubernamentales, ya provocó que su votación fuera pospuesta en el máximo tribunal, pero además el proyecto suscitó el rechazo del presidente López Obrador, quien afirmó que no tiene fundamento legal, atenta contra “nuestras tradiciones” y “la lucha social de Jesucristo”.
El 28 de noviembre, en su conferencia mañanera, a López Obrador se le preguntó su postura sobre el proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, y respondió: “Yo no estoy a favor de eso, yo creo que eso no tiene fundamento legal ni tiene que ver con nuestras tradiciones y costumbres. Además creo que es contrario a la libertad religiosa”.
Aseguró que el proyecto “no se va a aprobar, no creo que se apruebe. Esta es una opinión que se respeta, pero yo le digo al ministro por qué votó para proteger a los defraudadores fiscales y por qué ahora quiere prohibir algo que tiene que ver con la libertad religiosa, con la libertad de conciencia”.
El proyecto intenta, remató el presidente, “prohibir la celebración del hombre que más ha luchado por los pobres, porque Cristo fue un luchador social… siempre estuvo a favor de la justicia’’.
La propuesta presentada semanas previas a la Navidad