El tiempo es oro. Y Lionel A Marca lo sabe. El flamante CEO de la legendaria casa Breguet no solo lleva inmerso en el oficio de la relojería desde prácticamente su adolescencia, sino que es consciente del incalculable valor artístico que las piezas de coleccionista de tiempos pretéritos van sumando cada año que pasa. No es para menos: Abraham-Louis Breguet, el fundador de la empresa que ahora gestiona, la convirtió en la favorita de la realeza en los tiempos de María Antonieta, además de seducir a intelectuales como Baudelaire, León Tolstói y Víctor Hugo y a hombres de Estado como Winston Churchill. Con semejantes credenciales en la manga, no es de extrañar que Lionel a Marca no tenga la menor intención de buscar la cuadratura del círculo. Hablamos con él sobre su labor como cabeza pensante (y decisiva) de esta casa con casi tres siglos de historia.
Asumió el cargo de CEO de Breguet el año pasado. ¿Cómo se decidió a dar ese paso y cuáles son sus principales desafíos?
Era un reto de lo más estimulante en una marca fantástica. Así que cuando me lo propusieron era