Fotogramas

Críticas

Mantícora

Mantícora (España, 2022, 115 min.).

Dir.: Carlos Vermut. Int.: Nacho Sánchez, Zoe Stein, Vicenta N’Dongo, Catalina Sopelana, Ignacio Ysasi. DRAMA.

El peso de la culpa sobre la conciencia humana ha inspirado unas cuantas cimas de la creación artística, del estudio de la perversidad en el cine de Luis Buñuel a la observación del tormento en la literatura de Fiódor Dostoievski. Estas incisivas incursiones en el terreno de lo moral y lo social inspiran al Carlos Vermut de Mantícora, quien reniega de las piruetas estéticas y las carambolas narrativas que habían marcado sus films anteriores para entregar una prematura obra de madurez. En todo caso, Vermut sigue siendo Vermut, y en su nueva exploración de la monstruosidad las sacudidas del azar siguen repartiendo mucho dolor y gloria. Un incendio doméstico empuja al protagonista (un reptiliano y melancólico Nacho Sánchez) a romper la puerta de sus inclinaciones pedófilas; una muerte súbita afianza la historia de amor entre la bestia y la bella (Zoe Stein, un frasco pequeño lleno de virtud y apego), y un inesperado conflicto laboral propulsa el relato hacia un laberinto de pasiones situado entre tinieblas.

Demonios en el vacío. En su tramo central, Mantícora merodea en torno al difícil acercamiento entre sus dos protagonistas, revelando el tiempo y esfuerzo que se requiere para dejar atrás los demonios interiores y entregarse a la luz de los afectos. Una férrea lógica psicológica a la que cabe sumar el partido que saca Vermut a las calles vacías por las que deambulan los personajes, almas en pena que parecen salidas de un drama existencial de Michelangelo Antonioni.

De hecho, la omnipresencia del vacío da pie a notorios hallazgos visuales, como ese largo y diáfano plano fijo que, atravesado por un resplandor a lo Vermeer, arrincona al abatido protagonista en una suerte de penumbroso purgatorio.

Oleada de compasión. El trabajo de Vermut con la dimensión física de su cine alcanza nuevas cumbres gracias a la vigorosa representación de los ataques de ansiedad que sufre su hombre-bestia, y lo mismo ocurre con las inquietantes recreaciones de la pietà que coronan la recta final de Mantícora. Una conclusión que dejó en estado de shock a este crítico, que no recuerda una oleada de compasión similar, por parte de un cineasta para con sus personajes, desde la clausura de Elle de Paul Verhoeven. Con un atrevimiento y humanidad a prueba de balas, Vermut completa el interrogante de ¿quién puede matar a un niño? con otro de igual valor: ¿quién osa matar a un monstruo? Manu Yáñez

Entrevista con Carlos Vermut en pág. 66 y Fotomatón de Zoe Stein en pág. 32

ESTRENO: 9 DICIEMBRE PARA OTEAR LA MONSTRUOSIDAD HUMANA DE FRENTE, SIN MORALISMO Y CON COMPASIÓN.

Lo mejor: la sobriedad del trabajo escénico y de escritura.

para llegar a la luz,

Estás leyendo una previsualización, suscríbete para leer más.

Más de Fotogramas

Fotogramas1 min. leídos
¡Qué Bello Es Sobrevivir!
Antolog’a sangrienta. La saga Mad Max empezó hace exactamente 45 años. Lo hizo cuando al médico australiano George Miller (llamado ‘doc’ Miller en los rodajes) se le ocurrió cambiar el fonendo por una cámara para debutar en la dirección de una fábula
Fotogramas1 min. leídos
‘As Neves’
Un Oasis en Galicia. La viguesa Sonia Méndez escribe, dirige y produce su primer largo de ficción. Un thriller rodado en Galicia y en gallego en el que un grupo de jóvenes son los protagonistas. La cinta, que compitió en el Festival de Málaga por la
Fotogramas1 min. leídos
‘Un Sol Radiant’
Una niña y una universidad. Cuando Mònica Cambra, Ariadna Fortuny, Clàudia Garcia, Lucía Herrera, Belén Puime y Mònica Tort estaban en su último año de universidad, decidieron hacer juntas un proyecto audiovisual como trabajo de fin de grado. El quin

Relacionados